Apocalyptica revive el espíritu de Metallica en una noche explosiva en Guadalajara




Guadalajara, Jalisco

La oscuridad cayó de golpe sobre el Auditorio Telmex y, como un gesto heredado de décadas de tradición metalera, The Ecstasy of Gold abrió el paso a una velada que buscaba honrar tanto a Metallica como al sonido propio de Apocalyptica.

La pieza de Morricone funcionó como un breve respiro antes del estallido: un instante de expectación que preparó al público para la primera descarga. 

Sin previo aviso, Ride the Lightning surgió desde el escenario y bastó para que el recinto respondiera con una energía inmediata. Algunos asistentes levantaron el celular para registrar el momento mientras otros, impulsados por la potencia del arranque, se quedaron de pie siguiendo los movimientos de los chelos.

La banda, fiel a su estilo, dejó que la música hablara antes que cualquier palabra.

Fue con Enter Sandman cuando el ambiente terminó de encenderse. Las luces rojizas bañaron el recinto y los tres chelos proyectaron el riff clásico con la fuerza de una guitarra distorsionada, acompañados por la batería que desde hace un par de años forma parte del formato de la agrupación.

La reacción colectiva confirmó que la conexión se daba desde la memoria sonora compartida

“Estamos terminando nuestra gira en México y qué mejor que hacerlo con ustedes, esta gran audiencia de Guadalajara”, dijo Eicca Toppinen en uno de momentos en que el grupo se dirigió al público.

Apocalyptica revive el espíritu de Metallica en una noche explosiva en Guadalajara

Fotografía: Héctor Navarro

  • Agradecieron también la recepción del público mexicano antes de continuar con un repertorio que incluyó For Whom the Bell Tolls, The Call of Ktulu, St. Anger y otros temas de su más reciente disco Plays Metallica Vol. 2.

La ejecución mantuvo un ritmo ascendente; cada pieza alternó precisión técnica con una entrega escénica que hizo que buena parte de la audiencia permaneciera de pie. Los momentos más intensos llegaron con Master of Puppets, Seek & Destroy y Blackened, antes del cierre definitivo. 

Apocalyptica regresó brevemente al escenario para interpretar One, punto final de una noche que combinó homenaje, virtuosismo, nostalgia y Metallica.


Héctor Navarro