Bueno, bonito y … ¿Gratuito? Parte III: Música para el alma... con expertos




Guadalajara, Jalisco. 

¿Música para el alma? Sí: existe en YouTube, Spotify y hasta cuando gritas ¡Alexa! en casa. ¿Pero asistir a una escuela de jazz donde hasta los grandes exponentes se sientan a tu lado? 

Desde los ocho años, Juan José Valdivia entró a un coro infantil. Luego se incorporó a uno juvenil y, con esa pasión a cuestas, se metió a una escuela de música. Estados Unidos fue su nuevo destino y ahí dedicó un amplio porcentaje de su atención al jazz.

Ahora, él comparte su conocimiento en Guadalajara. Y sí: es bueno, bonito… y gratuito.

Juan José tiene 20 años impartiendo el curso de Verano de Jazz en la Escuela de Música de la Universidad de Guadalajara.

“Surgió como un sistema para poder darles una alimentación en verano a los grupos de Jazz que están en la carrera, que es la big band y algunos ensambles pequeños”.

Además, agregó que: 

“Es un curso abierto para todo público, tanto para los que tocan como para los que vienen simplemente a escuchar. No hay ningún impedimento”.

Para quienes estudian la carrera, ellos llevan ensambles orquestales y una es la big band de jazz, así que les queda como anillo al dedo. A este curso acudieron músicos como pianistas, que incluso gozan de una buena trayectoria en el medio.

“-¿Y a ti qué tanto te gustan los cursos gratis?- Los que se pueda agarrar, siempre que haya oportunidad”.

Bruno Valdez lleva seis años trabajando en el Mariachi Los Auténticos de Jalisco, es vihuelista y guitarrista. Tras concluir la prepa ingresó a la carrera técnica en música. Actualmente está en cuarto semestre de guitarra clásica y además toma clases de batería, así que este curso le sirve para aprender más sobre el género.

“La verdad, con este curso para nosotros que trabajamos el fin de semana en los eventos, en varias fiestas privadas, entonces este curso es perfecto para nosotros porque, como es de lunes a viernes, y es en la tarde,

nos da la oportunidad de seguir con nuestro trabajo, pero al mismo tiempo aprender un poquito más

 y, como menciona, los cursos gratis son una gran ayuda porque la mayoría de los que sí cobran sí están un poquito elevados de precio”.

El fundador del Mariachi Auténticos de Jalisco, Víctor Valdez, otro de los asistentes, cuenta que inició la agrupación hace 12 años y se regresó a la escuela.

“A mí me asombra demasiado el hecho de que sea gratuito y que, pues, no tenemos esa conciencia.

Muchas veces vemos ‘gratis’ y es algo como que no funciona para nosotros. Lo gratis, o tiene un truco que te van a cobrar, o no sirve, simplemente, aunque sea muy despectivo, pero no se fijan el detalle que aquí es un gran maestro que tiene una trayectoria buenísima”.

Al inicio, hasta el material era gratis, pero luego el maestro Valdivia lo encontraba tirado. Por eso, el director le recomendó cobrar siquiera lo mínimo para cubrir al menos las partituras.

“O sea, no porque sea gratis quiere decir que no tenga contenido ni valor académico;

tiene los mismos elementos que la formación en la carrera, pero está condensado para hacerlo en una semana o en 15 días. Sí está completo, hay un programa, un repertorio y un sistema para enseñar”.

  • Aunque si tuviera un costo, este taller no sería para todos.

“Una vez se le ocurrió a un director, no digo nombres. Dijimos: ‘vamos a cobrar seis mil pesos que es lo mínimo por una semana, dos horas cada día’. ¿Por qué? Porque una clase particular de un instrumento la hora te cuesta 500, 600 pesos.

Entonces, hicimos un cálculo y dijimos: ‘Vamos a cobrarles seis mil pesos’ y se inscribieron seis personas”.

¿Cómo ves? ¿A poco pensabas que en Guadalajara podías encontrar estudios fotográficos, cursos de bordado que animan al corazón y hasta talleres de música con expertos sin desembolsar un solo peso?

Pero lo bueno, bonito y gratuito no acaba ahí. Quédate conmigo: mañana te platico que hasta tus mascotas pueden gozar las bondades de una atención médica sin costo.


Elizabeth Ortiz