Bueno, bonito y… ¿gratuito?| Parte II: Hilar y tejer historias
Edición: David González




Guadalajara, Jalisco.

Llegamos a la Biblioteca Juan José Arreola buscando cursos gratis. Y encontramos uno que se llama “Hilando y Tejiendo Historias” para promover la lectura, y también recuperar la memoria del bordado con distintas técnicas.

Desde 2015 está disponible este taller; incluso, estudiantes del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA) de la UdeG acuden a él como materia extracurricular.

La encargada de Colecciones, Rosa Muro Castro, explica:

“Ahorita no está la compañera que está haciendo un cuadro del beso de (Gustav) Klimt, le están incrustando ya como joyería, cosas que no habíamos hecho, lentejuela, como bordados de alta costura”.

“Es bordado, es deshilado, estamos haciendo suéteres para sus nietas, cuadros en listón también”.

Como dije: llegamos buscando cursos gratis, pero tanto Rosa como la maestra de bordado María Luisa Vázquez López comentaron que hay otras razones… y no: no son los puntos extra para estudiantes, porque hay quienes se quedan tiempo después de terminar el horario y no faltan a esta actividad a pesar de que estén en periodo de exámenes.

“Es más allá. Encuentran un ambiente seguro, principalmente, y donde hay quien te pueda contener. Sí, a veces andamos medias tristonas y es un lugar donde te encuentras tú sola, sin que nos cuenten ya sabemos que algo traes”.

“Hay muchas personas que se integran al grupo porque quieren tener convivencia porque, después de la pandemia, hay muchas personas que perdieron la convivencia. Entonces tratan de tener una convivencia, salir, no estar encerrados porque yo les digo que para un adulto mayor la pandemia fue el encierro, no tanto la enfermedad”.

Pero tampoco es para todas las personas, porque hay quienes llegan por lo atractivo de lo gratuito y no regresan. La realidad es que no se conectan.

La maestra María Luisa tiene 35 años dando clases, ya sea con adultos mayores y hasta jóvenes que no saben usar la aguja, pero que se van extasiados con los bordados.

“Tenemos diferentes tipos de bordados y ha habido chicas que, sin saber tejer, empiezan a tejer. Ahorita tengo unas niñas que están haciendo muñequitas de tejido, amigurumis nuevos que hay y, para ser sus primeros trabajos, ellas están fascinadas; al final quedan muy bonitos”.

Y para que te des una idea de cómo han servido como auto terapia, quienes acuden a este taller han hecho piezas que les ayudan con el duelo.

“Tuvimos un taller de osos memoriales con prendas de personas que se nos fueron y que queremos guardar con una prenda de aquella persona, y les hacemos un oso y es manual completamente: desde cortar, coser a mano, rellenar, cerrar y los osos quedan hermosos, les ponemos una tarjetita que dice: esta es una prenda que yo usé, cuando me recuerdes avísame y contigo estaré”.

  • Así es. Nosotros vinimos para conocer cómo es un curso de bordado gratuito y salimos con un caldito de pollo para el alma. Pero aquí no para el hallazgo de lo bueno, bonito y gratuito.

Te invito a que no te pierdas la tercera parte de este trabajo especial. Te prometo que será música para tus oídos. 


Elizabeth Ortiz