Familias ocotlenses honran a los que ya no están en Día de Muertos
Foto: Juan José Martínez




Ocotlán, Jalisco

El 1 de noviembre marcado en el calendario como el Día de todos los santos es el arranque de las festividades en honor a los que ya no están; para nuestros ancestros significaba el inicio del camino al Mictlán.

Desde temprano en Ocotlán, los cierres viales anunciaron que la calle Madero desde Abasolo y hasta Juan Álvarez serían un recorrido peatonal, gastronómico y comercial donde puedes encontrar comida, flores, veladoras y hasta bocinas en venta.

Los vecinos del cementerio municipal, que dicho sea de paso es el actor estelar en estas festividades, aprovecharon sus cocheras para vender algún producto o servicio, como renta de espacios de estacionamiento para las motos.

Ya entrada la tarde los ocotlenses se comenzaron a reunir en la calle Madero y desde la plaza principal hasta el cementerio se podía observar su emoción por ver qué pasaría en el desfile de día de muertos que tanto presumió el gobierno municipal.

Los funcionarios locales caracterizados de catrinas y catrines, se hicieron presentes en calandrias para arrancar el recorrido ya pactado, en él también participaron academias de belleza, escuelas de baile y funerarias.

Al llegar al cementerio los ríos de gente eran evidentes, el vaivén de flores de cempasúchil, de coronas decorativas y de veladoras hacían alarde de la importancia que tiene recordar a los que ya no están físicamente, pero que siempre serán recordados.

Entre el tumulto unos iban y otros solo se detenían a observar la gran cantidad de gente que portaban maquillajes calavéricos en sus rostros.  Para Ailyn y su amiga, jóvenes estudiantes de bachillerato que tienen que cumplir con su servicio social fue su primera visita al cementerio durante estas festividades.

“Es la primera vez que vengo, a veces vengo con la familia pero hoy tocó venir por el servicio social”

El señor Leonardo Guzmán, destaca que es una festividad muy bonita y acude en familia a visitar a sus seres queridos que yacen en el cementerio.

“Es una festividad muy bonita en Ocotlán, venimos un ratito y luego nos vamos, venimos en familia, papá, mamá, hijos, hermanos, sobrinos, todos”

Melanie, una mamá joven, participó en el desfile y con un bello maquillaje de catrina igual al que llevaba su hija, mencionó la importancia de inculcar a los más pequeños nuestras tradiciones.

“Inculcarles cultura y sobre todo animarlos a que asistan a las festividades que hay”

Para Mayra, asistir estos días al cementerio se ha vuelto tradición en su familia.

“Nos gusta venir al panteón, convivimos en familia, velamos un ratito, nos gusta participar en las actividades que el Ayuntamiento nos brinda, todo en plan familiar”

Eran cerca de las 22 horas y en el panteón parecía no importar y es que el dos de noviembre es feriado en las escuelas, así que poco importaba la desvelada.

Dentro del cementerio un concierto con música regional amenizaba a los visitantes que se detenían a ver los altares de muertos y los tapetes de aserrín, mientras degustaban un café, té o chocolate que el DIF municipal ofreció.

No hay duda de que esta tradición es una de las más honrosas, basta ver como se unen las familias en torno a sus difuntos.