Parte I: Una denuncia por hora…
@lr87luzraquel♬ sonido original - Luz Raquel Padilla
Como Luz Raquel Padilla, 34 mujeres en Jalisco acuden diariamente a las instituciones de procuración de justicia para denunciar algún tipo de violencia de género en su contra y solicitar la protección del Estado.
Reportes de la Fiscalía Estatal muestran que, durante 2021, las Agencias del Ministerio Público en los dos Centros de Justicia para las Mujeres (CJM) del Estado recibieron 13 mil 514 denuncias por diversos delitos de género, mientras que en los primeros cinco meses de 2022 se acumulan seis mil 11 carpetas de investigación; es decir, en promedio, cada hora acude una mujer violentada a estos sitios.
A eso se suma que Jalisco ocupa el primer lugar en casos de violencia de género registrados a nivel nacional. Supera incluso al Estado de México, que tiene el doble de población.
El Banco Nacional de Datos e Información sobre Casos de Violencia contra las Mujeres (BANAVIM) muestra que, desde su creación en 2010 a la fecha, Jalisco registra 152 mil 592 víctimas, 155 mil 267 agresores y 77 mil 130 órdenes de protección emitidas.
Por sí mismas, las denuncias ante instancias estatales o municipales no garantizan que se pueda evitar la violencia más extrema contra ellas: el feminicidio. Así pasó con Vanessa Gaytán, atropellada y apuñalada por su ex pareja afuera de Casa Jalisco. Previamente, ella había denunciado en 16 ocasiones a su agresor y le otorgaron en tres ocasiones medidas de protección.
El feminicidio de Luz Raquel puso a Jalisco en una proyección mediática internacional por la brutalidad con la que fue asesinada, pero también por las omisiones que quedaron evidenciadas tras su muerte. Ambas acudieron a dependencias estatales y municipales, pero en ninguno de los casos pudieron evitar sus asesinatos. Ni fuera de la residencia del gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, uno de los lugares más vigilados y con mayor seguridad.
@lr87luzraquel♬ sonido original - Luz Raquel Padilla
Pese a la desconfianza que mostraba Luz Raquel hacia las autoridades, en mayo de este año denunció a su vecino en el Centro de Justicia para las Mujeres por el ataque que sufrió de su parte con cloro industrial. Le otorgaron una orden de protección, pero en sus redes sociales dio a conocer que, al acudir a la Comisaría de Zapopan a solicitar un pulso de vida, se lo negaron.
El presunto agresor fue detenido hasta después de su feminicidio y vinculado a proceso por estas lesiones.
Hasta cuando voy a tener que vivir con miedo de que me pueda pasar algo y a mi familia y mi agresor sigue campante por la ciudad con el peligro de seguir haciendo daño #justicia #nomasviolencia #noquieromorir #auxilio @AlertaGDL @FiscaliaJal @GobiernoJalisco @CJMJalisco pic.twitter.com/ZwBm1oAEOB
— Luz Raquel Padilla Gutirrez (@GutirrezPadilla) May 17, 2022
Yo hace unos días fui con mi oficio para pedir mi botón porque mi agresor es mi vecino y en la comisaría me lo negaron...
— Luz Raquel Padilla Gutirrez (@GutirrezPadilla) May 18, 2022
Las redes sociales de Luz Raquel evidencian que las amenazas de muerte por parte de Ismael N, su vecino, comenzaron desde enero de este año. El 16 de julio fue quemada viva en un parque ubicado a unas cuadras de su casa en la colonia Arcos de Zapopan, y días después murió en el Hospital Civil de Guadalajara a causa de las lesiones en 90 por ciento de su cuerpo.
En el informe sobre el tipo de denuncias que reciben los Centros de Justicia en Jalisco, se detalla que previo a un feminicidio, parricidio u homicidio contra las mujeres, la violencia familiar, psicológica y física son las que más reciben, al concentrar 60 por ciento de este tipo. Le sigue el delito Contra la Dignidad con 11 por ciento, las amenazas con 8 por ciento y lesiones, 5 por ciento.
Según datos del BANAVIM, en Jalisco hay una sola persona que es la agresora en 98.2 por ciento de las víctimas de violencia de género que acuden a pedir apoyo a alguna instancia gubernamental.
Pero… ¿en qué concluyen estas denuncias? No se pierda mañana una segunda entrega de este trabajo especial: Violencia contra mujeres: un grito sin eco en Jalisco.