Como si se tratara de un atractivo turístico, un foco de contaminación en pleno centro de la ciudad recibe a los visitantes. Se trata del predio ubicado en la Calzada Independencia, en su cruce con Prisciliano Sánchez. El  lugar donde estuvo el Cine Metropolitan.

Hoy el terreno que llega hasta la calle Antonio Molina es un foco de infección. Esta convertido en una alberca gigante. El agua estancada es verde por una gruesa nata de lama en la que flotan botellas de vidrio y plástico, basura, ramas y hasta balones de futbol.

La altura del agua estancada se desconoce pero se calcula que se encuentre en casi metro y medio. A la escena se suman nubarrones de mosquitos que podrían tratarse de ser transmisores del dengue o el Zika.

Los vecinos dicen que ya están hartos de la situación, como don Filiberto García, quien vende cacahuates frente al predio.

Otros vecinos se quejaron de que en la zona, ese predio se ha convertido en nido de delincuentes y de viciosos que han realizado actos de “graffiti” en el lugar.

Incluso se puede observar casa improvisada con tablas y lámina, pero nadie supo decir  quién vive ahí o si es un cuidador.

Mientras tanto, el predio se deteriora más cada día.