Guadalajara, Jalisco.

Correr es sano. De eso no hay duda alguna. ¿Pero dedicarse a ello puede llevar alimento a la mesa?

A lo largo de este especial hemos relatado la historia de éxito de los hermanos Oropeza en pruebas atléticas, en donde la gran mayoría de personas paga por competir.

Y entonces, ¿se puede vivir de las competencias de 5, 10, 21 y 42 kilómetros?

Isabel e Israel afirman que, aunque es difícil al principio, sí. Ellos han hecho del atletismo su trabajo, suestilo de vida y su generación de ingresos.

“Yo la verdad que vivo del deporte. Es algo a lo que le dedico gran parte de mi vida y, pues, también busco que sea redituable porque, si me dedico a esto y trabajo, es muy complicado.

O sea, mantenerte en este nivel y sí se puede pues vivir de esto si tú sabes hacerlo de una manera inteligente”.

“A la altura en la que estamos nosotros actualmente sí se puede vivir bien de esto, pero al inicio no, al inicio la verdad es mucho el sacrificio.

Se viven muchos problemas económicos, por lo regular son muy pocas las personas que creen en ti, que creen en lo que puedes lograr y una de esas personas fue mi madre”.

Para que te des una idea, en estas competencias se otorgan grandes bolsas a nivel nacional, pero son mucho más atractivas si la carrera es de escala global.

Los maratones que se realizan en Estados Unidos reparten cifras económicas muy altas a sus ganadores. El de Bostón, uno de los más importantes, tiene una bolsa de 150 mil dólares para su primer lugar, de 75 mil para el segundo y de 40 mil para el tercero.

Foto de RUN 4 FFWPU: https://www.pexels.com/es-es/foto/personas-que-usan-zapatos-para-correr-2526878/

Y esto sin contar los premios por romper algún récord o marca, que van desde 25 mil hasta los 50 mil.

Entonces, con una victoria internacional los atletas de primer nivel pueden ganar hasta 200 mil dólares, que equivalen a más de cuatro millones de pesos. Ahí está la prueba de que sí se puede vivir de correr.

Te comparto más ejemplos: en los maratones de Berlín y Londres se reparten bolsas de 22 mil a 60 mil euros: que traducidos en pesos son entre 463 mil y un millón 263 mil.

La otra es que hay muchas competencias por año en todo el mundo. Entonces, ¿qué futuro tiene un corredor que gana seis o siete maratones por año? La garantía es que su cuenta bancaria cierra con muchos ceros a la derecha.

Pero triunfar en México no es menor.

Aquí las bolsas también son bastante atractivas para los competidores de élite.

• En Ciudad de México y Guadalajara los premios son de 612 mil pesos, más un reloj de lujo, y 200 mil pesos, respectivamente. Y eso sin contar el premio para el mejor corredor mexicano o mejor jalisciense, que es de 35 mil pesos cada uno, sin importar si no cruzan en las primeras tres posiciones.

En el mejor escenario, un corredor profesional puede ganar 42 mil pesos mensuales al competir en este país. Lo equivalente a 150 veces el salario mínimo.

Por eso es que los hermanos Oropeza no se conforman con ser profesionales del deporte; también quieren destacar a nivel mundial representando los colores de su país en los próximos Juegos Olímpicos, a celebrarse en Los Ángeles en 2028.

Isabel ya ha participado con la bandera tricolor en el pecho en distintos eventos centroamericanos o panamericanos. La destacada representante originaria de Tonalá asegura que su meta es seguir compitiendo por México. ¿Pero cómo trabaja para lograrlo?

Su entrenador, Omar Alfaro, nos lo explica.

“Los juegos pasados, Isabel se quedó a nada de ir. Entonces, ese es uno de los principales objetivos para la siguiente: estar presentes ahí y eso es lo que está en mente ahorita. Bueno, para ella lo que sí estuvimos analizando fue que le hizo falta: trabajo mental. Entonces, ya se está trabajando en eso, ella tiene ya su psicólogo”.

Pero lejos del dinero, la fama y el reconocimiento de una autoridad que se irá en tres o seis años, el mayor legado de una familia de atletas es ver reflejado su nombre en la historia del deporte.

Y de esas dinastías, Jalisco ha acumulado bastantes a lo largo de los años. Ahí están, por ejemplo, los Álvarez en el boxeo, los Pérez en el Automovilismo, los Palafox en el tenis, los Mercado en el ciclismo o los Rodríguez Faisal en frontón.

Así que el deporte, cualquiera que este sea, no es sólo una actividad recreativa que libera estrés, mejora la salud y aumenta la calidad de vida. También es un gran aliciente para vivir bien y, como los hermanos Oropeza, ganar en familia.