Este lunes concluye el diagnóstico que encargó el Ayuntamiento de Guadalajara a la escuela de Conservación de Occidente y el director de proyectos de espacios públicos, Ricardo Agraz, adelantó que los resultados serán científicos. 

Por ejemplo, a la escultura de 74 metros de diámetros le encontraron un proyectil de bala calibre 45 milímetros en su escudo. Además, el daño estructural podría ser peor de lo pensado, si se toma en cuenta que las muestras que se tomaron se podían triturar con las propias manos. Con 59 años de edad, la emblemática figura se parece más a un terrón de azúcar que a una guardiana de ciudad. En un video que hizo circular el propio ayuntamiento en sus redes sociales, se ve cómo el alcalde Enrique Alfaro Ramírez puede triturar con sus manos las piezas que fueron retiradas para diagnosticarlo.

Será esta semana cuando se dé a conocer la ruta crítica que deberá de seguir la comuna tapatía para restaurar una de las fuentes con más carga simbólica de Guadalajara. Sin embargo, el problema es más profundo. 

El ayuntamiento tapatío ha contabilizado 15 esculturas que requieren intervención urgente, este mismo año. Entre ellas la escultura de Los Magos, en la explanada del Instituto Cultural Cabañas, la Plaza Juárez y el Pájaro, la Madre Patria y la fuente Olímpica de la Calzada Independencia