Guadalajara, Jalisco.

La impunidad en el asesinato de la periodista de La Jornada, Miroslava Breach, por qué no se le protegió si había advertido de amenazas y su intervención en la escena del crimen, fueron cuestionamientos que periodistas hicieron al ex gobernador de Chihuahua, Javier Corral durante la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara.

Dentro de la mesa “El caso mexicano: informar bajo fuego”, que organizó la Bienal de Periodismo de la Cátedra Mario Vargas Llosa, el ex gobernador era uno de los participantes, junto con las periodistas Marcela Turati, Adela Navarro y Ricardo Raphael.

En un panorama en México donde 14 periodistas han sido asesinados, 12 más están desaparecidos y los mecanismos de protección son inútiles, así como la presencia del ex gobernador, Marcela Turati consideró pertinente discutir el caso de Miroslava como el mejor ejemplo de impunidad y falta de prevención, pues se deben muchas explicaciones ante múltiples irregularidades.

“Un gobernador que se mete a la escena del crimen a supervisar y a tocar también evidencias, como quedó en claro, la negación a la familia del expediente judicial durante 10 meses, a una parte de la familia y el caso quedó como rehén porque lo atrajo la

Federación. La Federación también en este pique entre el gobierno estatal, Fiscalía estatal y Fiscalía federal, y bueno hay dos personas detenidas, nos siguen debiendo las líneas de la narco político, seguimos sin saber qué pasó”, señaló Marcela Turati.

La periodista y directora del semanario Zeta, Adela Navarro especificó que el ex gobernador del que hablaba Marcela era quien estaba sentado en la mesa y le pidió explicaciones sobre la falta de justicia por Miroslava.

Javier Corral dijo que vio necesario participar para tener la oportunidad de manifestar que desde lo local se hizo todo para aclarar el asesinato, y trasladó la responsabilidad a la Fiscalía General de la República (FGR), quien atrajó el caso, de la falta de avances. Negó su intervención en la escena del crimen.

“Hay muchas afirmaciones, pues con las que yo no puedo concordar, aquí ha dicho Marcela que yo estuve en la escena del crimen, interfiriendo en la escena del crimen, pues esto no es así, se ha dicho, pero eso no está ni probado. Lo único que les puedo decir es que a los minutos del asesinato de Miroslava, con su hermana, con su familia, con su hija, con Andrea, con su hijo y por supuesto yo me he mantenido en comunicación con ella”, contestó Javier Corral.

Añadió que nunca se protegió a nadie, no se ocultó un solo dato, todo se puso a disposición del ministerio público, pero no podía entrar a los temas de delincuencia organizada, pues no tiene la menor duda que ahí está la autoría intelectual y constituyó una frustración no llegar a los agresores.

En su intervención, el periodista y académico, Ricardo Raphael habló sobre las alianzas de medios y gobiernos. Aclaró que no es lo mismo medios que periodistas, y las diferencias son entre el poder y el periodismo. Lo díficil que es ejercer así, si a eso se le suman las pésimas condiciones laborales.

“Hay un pleito con el periodismo, con quienes trabajamos en medios, que hacemos investigación, con quienes no vivimos de la publicidad del gobierno o de negocios paralelos que el gobierno ofrece. Es un mal diagnóstico. El presidente no está contra los medios / Haber, trabajamos por honorarios, el aguinaldo es algo que nunca he visto en algún lugar, prestaciones ninguna, seguro médico de vida, en mi caso soy hiper privilegiado, las condiciones materiales para ejercer el periodismo están hechas pedazos, en una época donde tenemos que cubrir un conflicto armado interno”, señaló Ricardo Raphael.

Las y los periodistas concluyeron que México es el país sin guerra más peligroso del mundo para hacer periodismo y está en medio de una desprotección e impunidad.

Ante eso, la petición fue a la sociedad para no dejar solos a los periodistas críticos porque con sus asesinatos se silencian las causas que abordan, pero también a los colegas a exigir justicia y terminar las investigaciones por las que ocurrieron sus homicidios.