Guadalajara, Jalisco.
Jonathan Serratos Virgen o “John”, como lo llaman su familia y amigos, salió el 9 de julio pasado a un bar con unas amigas. A las 3 de la mañana las llevó a su casa, pero él está desaparecido desde ese día.
Poco antes de las 6 de la tarde de este sábado, se realizó una manifestación, que partió de La Minerva hacia Casa Jalisco, para exigir su localización. Hasta entonces, la familia desconocía los avances de la investigación, tras presentar la denuncia en la Fiscalía Estatal desde el martes pasado, pero coincidentemente en ese momento les informaron avances.
Fotografía: Fátima Aguilar
Además, su ficha de búsqueda no se emitió de inmediato.
Sandra Serratos, hermana de Jonathan, contó que a la par de la manifestación, la Fiscalía les mostró la sábana de llamadas y les informó que habían encontrado el vehículo en Miramar, luego que sus familiares reportaron que se habían activado los datos de su celular.
“El carro ya fue localizado cerca del tutelar hace rato, una hora a lo mucho, localizaron el carro, pero pues mi hermano sigue sin aparecer, entonces pues continuamos con esta búsqueda pues hasta encontrarlo y saber dónde está él. A la mejor el carro, encontrarlo ya es un indicio, te da un poquito de esperanza, pero pues a la vez a quien quieres no está”.
Entre estas consignas, la manifestación avanzó por López Mateos hacia Casa Jalisco, donde fueron atendidos por personal de la Comisión Local de Búsqueda. Ahí le ofrecieron a la familia, comenzar hasta este lunes con pegas de fichas de búsqueda en esa zona de Miramar y Pueblo Quieto, otro punto donde también marcó la ubicación de su hermano.
Sandra dio a conocer que las amigas de Jonathan ya rindieron su declaración, pero aún faltan cosas por desahogar, como la revisión de las cámaras del C5.
“Hasta hoy yo me enteré, estaba yo ahí en la Fiscalía y salieron los comandantes, vamos a ir a la zona donde ubicamos, y pues no sé, no te puedo decir si antes hicieron o no hicieron. Me consta que hoy sí salieron a buscarlo, ya me dijeron que encontraron el carro, pero falta mi hermano”.
Otra vez las familias encontraron la residencia del gobernador, Enrique Alfaro envallada. Solicitaron una audiencia con él, así como con el alcalde de Guadalajara, Pablo Lemus, municipio en el que desapareció Jonathan, pero no se les atendió.
“Esto es una tortura, no saben. Ya estamos hartos, señor Alfaro. Exigimos por favor una audiencia con usted, con el alcalde, por favor para que nos atiendan, atiendan nuestros pedidos que tenemos porque la Fiscalía va muy lenta. No nos dan solución rápido, hemos visto casos de personas que llevan años buscando a sus desaparecidos y no queremos que nuestro hermano, nuestro familiar, nuestro amigo, sea una estadística más”.