Guadalajara, Jalisco.

Cuando las personas se quejan de las autoridades ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos, lo que sucede es que las recomendaciones dirigidas al personal que trabaja en Gobierno se “empaquetan” bajo el argumento de que reflejan un patrón.

Si se parecen, las hacen públicas de manera concentrada y, sí: en fechas donde nadie les va a prestar atención.

Aunque son delitos distintos, en Jalisco los feminicidios y los casos de personas desaparecidas tienen algo en común: las deficiencias al integrar la carpeta de investigación o cómo actúan los agentes del Ministerio Público, explicó el director de seguimiento de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, Fernando Zambrano Paredes.

"El patrón sistemático que desafortunadamente encontramos en esas dos agendas se circunscribe a la falta de coordinación entre las autoridades que, con motivo de sus funciones, tienen competencia para conocer de los hechos.

No hay una debida coordinación que amerite en un momento dado que la información que tenga un área determinada: la Fiscalía, se la pueda compartir en tiempo real a la Comisión de Búsqueda de Personas Desaparecidas o a diferentes áreas que integran la Fiscalía".

Por ejemplo, la Comisión emitió una recomendación a finales de 2023 en la que concentró 31 casos.

Al juntarlos en un solo documento, prácticamente desapareció detalles como el caso de Héctor Daniel Flores, a quien la Fiscalía tardó un año para iniciar el plan de investigación, y hay otras víctimas en las que demoró hasta tres.

Lo peor es que cada recomendación integra a más víctimas, de tal forma que en esos 31 exhortos hay más víctimas: las directas y las colaterales. Así también se “desaparece” a los afectados.

Incluso, Derechos Humanos detectó que en 20 de esos casos ni siquiera hubo un protocolo para buscar a personas desaparecidas.

Al respecto habla el cofundador del colectivo de búsqueda Luz de Esperanza, Héctor Flores:

“Y de que salgan recomendaciones en una concentradora, pues sí, efectivamente se debe a la falta de personal que tiene la Comisión y sacan este tipo de recomendaciones concentrando varias; lo ideal sería que se dé una recomendación por cada queja y concuerdo: pierde impacto”.

Y sí: hacen falta visitadores para ejercer más presión ante el Gobierno.

¡Pero no hay presupuesto! Y en caso de que hubiera, parte de ese monto sería para arreglar el edificio sede, pues ya se ha dicho que tiene daño estructural. Aunque para las familias de desaparecidos la prioridad es que haya más personal de campo.

“De alguna manera quieren sacar el rezago que trae la Comisión Estatal y pienso que es de esta forma para ir sacando el trabajo. No creo que sea lo mejor o lo más conveniente; creo que es por eso para ir sacando todo el rezago y todo el atraso y a pesar de que en el área de desaparecidos no contamos desgraciadamente con tantas quejas”.

Y así, sin presión de la Comisión, hay casos tan mediáticos y mal manejados como el de los ocho jóvenes que trabajaban en un call center de Zapopan, y quienes fueron asesinados.

¿Sabías que los familiares de cuatro de ellos se vieron obligados a pedir ayuda a Derechos Humanos porque no les entregaban los restos?

Mientras tanto, hay otros grupos que se siguen sumando a colectivos de búsqueda porque incluso sus hijos son sacados de casa o del trabajo.

“No, es en todos lados. Mi hijo desapareció hace dos años, (pero) no desapareció, fue sustraído de su domicilio.

Carlos Maximiliano, el hijo de la presidenta, fue sustraído de su domicilio mientras le ponían una pistola en la cabeza a su mamá, presuntamente elementos de la Fiscalía, la mayoría de las desapariciones no desaparecen: son sustracciones”.

• Y si crees que no hay colmos respecto al trato que se da a las víctimas, imagínate si esta Comisión no existiera. ¿Quién vigila que no te torturen o detengan ilegalmente? ¿Quién ejerce presión para que se respeten tus derechos humanos? No te pierdas la tercera parte de este trabajo especial.