Guadalajara, Jalisco.

Tras los resultados del Instituto Nacional Electoral (INE) sobre el ejercicio de revocación de mandato del Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), que revelaron el desaire de ocho de cada 10 electores, el politólogo y analista Javier Hurtado consideró que “se aminora la posibilidad de solicitar la prolongación del mandatario en el Gobierno”.

Al no obtener los 37 millones de votos requeridos para que el ejercicio fuera vinculante y sólo un 17% acudiera a participar, el analista manifestó que puede haber “mesura” desde el Presidente, el Poder Legislativo y el Judicial para seguir la ruta de gobiernos como el de Hugo Chávez en Venezuela y Evo Morales en Bolivia.

“Con los resultados que se obtuvieron el día de ayer, pues está muy lejos de que el Presidente de la República pueda hacer el mismo procedimiento y utilizar los mismos argumentos para, hipotéticamente, solicitar una prolongación de su mandato. Entonces, creo que coloca en cierta mesura las cosas; las pone en su justa dimensión”.

Recordó que, en el caso de Venezuela, la participación fue de 64% y votaron a favor de Hugo Chávez 59%. Con Evo Morales, como era obligatorio acudir a las urnas, votó 83% de la población y 63% lo respaldó para que siguiera, de ahí se justificó para modificar la Constitución y reelegirse indefinidamente.

Para el politólogo, este ejercicio también le sirvió a Morena como “laboratorio” a fin de medir el apoyo con el que aún cuenta.

“De ver dónde están sus puntos fuertes, y sus puntos débiles en los diferentes estados de acuerdo a los porcentajes de votación que recibió y dónde es donde deben apretar el trabajo con miras a las elecciones de 2024”.

Atribuyó el abstencionismo a que la ciudadanía consideraba “innecesario” el ejercicio y para no engrosar el porcentaje de participación que lo volviera vinculante.

Para él, el cargo de Presidente de la República no puede estar sujeto a la revocación de mandato porque es demagogia, populismo y autoritarismo. Además, implicó un costo de mil pesos por voto, un gasto innecesario cuando se sabía que López Obrador mantiene un alto porcentaje de aprobación en México.