La última vez que la ciudad de Guadalajara tuvo un plan de Ordenamiento Territorial Metropolitano fue en 1982, cuando el gobernador era Flavio Romero de Velasco y el alcalde era Guillermo Vallarta. 

El documento que consta de 525 páginas tuvo un costo de casi dos millones de pesos. Además, de acuerdo con el presupuesto de egresos del Instituto de Planeación, el Plan de Ordenamiento tiene un retraso de tres meses, pues debió concluirse en marzo pasado. 

Algunos datos relevantes que destaca el diagnóstico de la ciudad son los siguientes: 

1.- Sólo cuatro de nueve municipios están incluidos en el Sistema Intermunicipal de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (Siapa). Es decir, El Salto, Juanacatlán, Tlajomulco de Zúñiga, Ixtlahuacán de los Membrillos y Zapotlanejo cuentan con su propio sistema de abastecimiento de agua potable y alcantarillado. 

2.- El 70 por ciento del agua que consumen los habitantes de la ciudad, proviene del Lago de Chapala. El 22 por ciento proviene de pozos profundos y sólo el ocho por ciento proviene de otras fuentes alternas de abastecimiento. 

3.- Guadalajara tira el 45 por ciento de la basura que se produce en la ciudad, con dos mil 72 toneladas diarias. Y no es porque los ciudadanos sean más sucios que en otros municipios, sino que 180 mil personas vienen todos los días a la capital a trabajar a los barrios centrales. 

4.- El porcentaje de cobertura en transporte público es desigual. Mientras que un tapatío tiene 99 por ciento de probabilidades de encontrar un transporte público que lo conecte, en Tonalá se reduce al 87 por ciento, en Tlajomulco al 62 por ciento y en Ixtlahuacán de los Membrillos, apenas el 20 por ciento de la población tiene cobertura de transporte público.  

5.- Seis de los nueve ayuntamientos que componen la mancha urbana, incumplen con actualizar los planes parciales de desarrollo, que son los instrumentos básicos de planeación que deberían de ser cambiados cada tres años. Sólo Guadalajara, Tlaquepaque y Zapopan los actualizaron en la administración pasada, aunque en la capital están impugnados en tribunales. 

6.- El Plan de Ordenamiento Territorial Metropolitano documenta la invasión territorial de suelos agrícolas para la construcción de vivienda, sobre todo en el Cerro del Cuatro y el Cerro del Tesoro, lo que ocasiona riesgos para los pobladores de asentamientos irregulares. 

7.- Y existen 386 kilómetros lineales de frontera municipal que los ayuntamientos se disputan todos los días para la entrega de servicios de bacheo, alumbrado público y seguridad. Son las llamadas fronteras donde la falta de servicios es una constante.  

Toda esta información está a disposición de los ciudadanos, y se puede consultar en la página del Instituto Metropolitano de Planeación (Imeplan) en www.imeplan.mx.