Guadalajara, Jalisco.

Periodistas sinaloenses del semanario Rio Doce, colegas de Javier Valdez, asesinado el 15 de mayo de 2017, y su viuda, Griselda Triana, hicieron desde la FIL un reclamo a las autoridades federales, porque el crimen del reportero de Culiacán, se mantiene en la impunidad. 

Griselda Triana, quien encabeza el colectivo Tejidos Solidarios, junto con Ismael Bojórquez, director del semanario Río Doce y el ex jefe de información de esa , Andrés Villarreal, participaron en la Cátedra de Libertad de Expresión 2023 dedicada a Javier Valdez.

En donde señalaron que en efecto, hay dos personas sentenciadas por el homicidio de Javier, sin embargo, el autor intelectual Dámaso López Serrano “El MiniLic”, es testigo protegido del gobierno de Estados Unidos, en lugar de que sea extraditado a México.

“Aquí lo más doloroso y lo más lamentable es que el autor intelectual, es decir, Dámaso López Serrano, alias “El MiniLic” está libre desde hace más de un año, fue dejado en libertad.

Él se encuentra en Estados Unidos y ahora con un cinismo y una desvergüenza total se dedica a dar entrevistas, comentando que él no fue quien ordenó el asesinato de Javier, sino que fueron los hijos de Joaquín Guzmán Loera “El Chapo” Guzmán, quienes ordenaron su asesinato.

Y yo me pregunto: ¿por qué no viene ese cabrón aquí a México a dar la cara y a dar declaraciones como las que está haciendo en Estados Unidos?”, afirmó.

Durante la Mesa: “Sobre la violencia contra los periodistas en Sinaloa. El trabajo de Javier Valdez”, Ismael Bojórquez, director de Río Doce, donde escribía el autor de “Mala Yerba”, relató que, tras la muerte de Valdez, ningún periodista del semanario se doblegó.

“Cuando matan a Javier, obviamente ese compromiso se redobla, es decir, nosotros no podíamos rendirnos después del crimen de Javier y menos con lo que estamos contando de lo que ocurrió en la redacción dos o tres días después.

No podíamos decir aquí está la libreta, aquí está la pluma y está cosa está muy cabrona y mejor cerramos el periódico y nos vamos. Al contrario, la muerte de Javier para nosotros significó un compromiso más para seguir haciendo lo que estábamos haciendo”, relató. 

Andrés Villarreal, periodista sinaloense, explicó que a Javier Valdez lo silenciaron por reportear lo que algunos no querían que se supiera.

“Hace casi siete años asesinaron a nuestro amigo el periodista Javier Valdez, no tenemos ninguna duda que lo mataron por sus palabras, por lo que escribió en blanco sobre negro.

Su crimen, como el de Manuel Buendía, es otra prueba del poder de las palabras, escritas en papel, nadando entre las redes de internet o simplemente dichas en una plaza o dichas en el desierto”, finalizó.

• Griselda Triana dijo que como familia y sus ex compañeros tienen la misión de que el crimen de Javier Valdez no quede impune y van a reforzar la memoria de la sociedad, para que el caso no se olvide.