Guadalajara, Jalisco.

En el informe publicado por el Comité Universitario de Análisis en Materia de Desaparición de Personas de la UdeG, donde señalan el aumento de la crisis de desapariciones en el estado, su integrante y académico, Jorge Ramírez llamó a las autoridades a reconocer el problema y modificar su estrategia de seguridad.

No es la primera vez que el comité u otros colectivos y especialistas insisten en la necesidad de que el Gobierno del Estado dimensione la crisis para crear nuevas políticas de seguridad.

“Si te fijas, el incremento es escandaloso, no se ve cómo puedan frenar eso. Entonces urge. un golpe de timón, un cambio de estrategia radical y lo primero pasa por decirlo por mencionar que hay un problema y luego tomar las acciones conducentes (...)

Es una estrategia de silencio, de no se dice nada, no se menciona. Lo único que han sacado a partir de abril para acá, son dos o tres boletines, dos o tres tuits del gobernador y ahí se ha acabado la comunicación pública sobre el tema”, lamentó.

El académico indicó que los sectores más vulnerables son los hombres y mujeres jóvenes, ya que gran parte de las desapariciones se deben al crimen organizado que utiliza el reclutamiento forzado y la trata de personas. 

Además, detalló que es el mismo crimen organizado el que “vende la paz” en las localidades, a cambio de exterminar la inseguridad ejercida por otros grupos delincuenciales, algo que es tolerado por las instituciones públicas.

“También muy importante y quizá ahora predominante es que es un cártel que ejerce lo que se llama ‘gobernanza criminal’, son los que pacifican los lugares, son los que arreglan los problemas de seguridad. Pero en realidad se trata de exterminio, hay una acción de exterminio tolerada por las autoridades, no reconocida, no nombrada y eso es lo que está detrás de la gran mayoría de desapariciones”, señaló.

Mencionó que las localizaciones también han disminuido y que la crisis forense persiste en el Estado.

“No solamente se ha agravado, sino que la autoridad viene dando menos resultados, ha perdido eficacia. El año pasado hubo menos localizaciones que en años anteriores y también la crisis forense persiste. Tenemos una caída en la identificación de las personas que se han encontrado en fosas. Por el lado que se le vea, estamos mal en el tema y lo más grave, no se dice y no hay ninguna señal de cambio”, expresó.

Ramírez Plascencia insistió que el Gobierno del Estado primero debe reconocer y dimensionar el problema de desapariciones para crear una estrategia de seguridad efectiva.