Guadalajara, Jalisco.

La filóloga y ensayista Irene Vallejo y el argentino-canadiense Alberto Manguel aperturaron el Salón Literario y recibieron la Medalla Carlos Fuentes de manos de Silvina Lemus viuda de Fuentes, en el segundo día de actividades de la FIL.

Vallejo quien recientemente fue galardonada con el IX Premio Internacional de Ensayo Henríquez Ureña, agradeció la distinción de la FIL, recordó anécdotas del cómo se enamoró de la lectura gracias a los libros que le leía su padre de niña y destacó que leer es un acto revolucionario, siempre lo ha sido y siempre lo será; además de que uno de los grandes avances que se ha tenido es la democratización de la lectura, pues cuando inicia la historia del libro, éste sólo era un objeto para los más privilegiados; escuela sacerdotal, los aristócratas; pero tras siglos, el acceso a libros se extendió a los más populares.

"Han sido necesarios siglos y siglos para que los libros se vayan expandiendo y vayan recibiendo a las personas que quedaron excluidas y ese ha sido un gran logro colectivo. Me parece muy importante subrayar que aunque la lectura y la escritura son actividades solitarias; la salvación, la protección de los libros, su expansión y que haya llegado un momento en el que miles de personas puedan reunirse en esta sala para celebrar la fiesta de los libros, es el resultado de un esfuerzo común de muchas personas que sin conocerse, han luchado para conseguir que todos nosotros podamos disfrutar hoy de esto".

La escritora, destacada por su obra “El infinito en un junco”, recordó que en el siglo XVIII se leía menos porque los más poderosos no querían un pueblo lector, pues bajo el argumento de que leer fomentaba sueños y mejores expectativas de vida, el fomento a la lectura era reprimido.

Por su parte, Alberto Mangel reconoció a Irene como la pionera de una nueva generación de lectores y que la evolución de la lectura no es una progresión matemática, sino un proceso que toma diversos elementos de diferentes etapas de la historia. Antes eran los pergaminos, ahora son las tabletas, muy similares entre sí.

Al recibir la medalla, Vallejo pronunció una de las frases más icónicas de Carlos Fuentes: "Creemos conocer el mundo, ahora debemos inventarlo".