El presidente municipal de Guadalajara, Enrique Alfaro Ramírez, visitó las instalaciones de lo que será el nuevo Mercado Corona. Luego de un breve recorrido, señaló haber identificado los riesgos que enfrenta el edificio con filtraciones en los niveles más bajos del sótano y porque las calles colindantes tienen hundimientos. Ante esto, señaló que no recibirá la obra hasta que se garantice la seguridad de los locatarios y los clientes.

Una vez que terminó de recorrer los primeros pisos del inmueble, Alfaro Ramírez salió a caminar por las calles donde fueron desalojados los comerciantes del Mercado, y donde trabajan desde hace 15 meses. Escuchó reclamos porque algunos de ellos ya conocieron el espacio que les será destinado, y están en desacuerdo por la asignación y la cantidad de metros cuadrados que van a tener.

Sobre las inundaciones que tiene uno de los niveles del estacionamiento subterráneo, y que afecta 60 espacios para poder explotarlo, el alcalde habló en una primera rueda de prensa que un aumento a la contraprestación a la empresa constructora sería “una broma de mal gusto”.

El pasado 29 de septiembre, en un acto simbólico, el entonces alcalde Ramiro Hernández García comenzó la entrega de locales comerciales. En un evento protocolario, el propio expresidente municipal confesó que la decisión de hacer tan rápido el inmueble fue una decisión “arrojada y un tanto irresponsable”.