Santiago de Chile, un espejo de Jalisco; allá también la ciudad crece sin tomar en cuenta el entorno




Guadalajara, Jalisco. 

¿Sabías que Santiago de Chile tiene casi el mismo número de habitantes que Jalisco?

Allá viven 8.3 millones de personas.

Su gobernador Claudio Borrego y ex Ministro de Vivienda estuvo en la Cumbre Internacional del Hábitat para América Latina y el Caribe.

Dijo que el desafío en América Latina es compatibilizar la urgencia de la vivienda con la ciudad porque edificar sin tomar en cuenta el entorno es como construir guetos, así que es necesario resolver con equipamiento, transporte, accesibilidad  y espacio público.

Cuando los turistas viajan a Santiago se quedan con la foto de La Cordillera, el edificio más alto de Sudamérica, pero en otro punto está la Plaza Asunción, en una comuna pobre que se llama San Ramón, donde solo hay un juego en el espacio público para 40 mil habitantes.

Así que para esas personas “Santiago no es un buen lugar para vivir”.

Santiago tiene un buen promedio de áreas verdes comparados con América Latina, pero al ver por zona, hay áreas con 19 metros cuadrados por habitante y otras con solo tres. Sin embargo, el cambio climático trae olas de calor.

“El cambio climático va ser la nueva cara de la desigualdad urbana porque va a afectar en todo el mundo y en América Latina y en Santiago en particular, más a los sectores más pobres, en promedio, cinco a siete grados más

en las zonas pobres donde no hay arbolado urbano, donde no hay espacios públicos, donde no hay refugios, donde no hay aire acondicionado”.

Incluso tuvo que cambiar un tercio de las ambulancias por unas con aire acondicionado; tiene planeado plantar 200 mil árboles en la ciudad en las islas de calor, en las zonas más pobres.

“El cambio climático va ser la nueva cara de la desigualdad urbana porque va a afectar en todo el mundo y en América Latina y en Santiago en particular, más a los sectores más pobres, en promedio, cinco a siete grados más en las zonas pobres donde no hay arbolado urbano, donde no hay espacios públicos, donde no hay refugios, donde no hay aire acondicionado”.

Su apuesta es cambiar el entorno urbano en áreas intermunicipales, donde el municipio por sí solo no puede hacerlo.

Santiago, con casi el mismo número de habitantes que Jalisco tiene 20 mesas de análisis temáticos, le apuesta a la participación ciudadana y a la transparencia porque así hay mayor interés.

Y aunque las personas se sienten muy orgullosas de su sistema de tratamiento de residuos, rellenos sanitarios con estándares internacionales hay un problema con la basura.

“Vertederos ilegales, de una mafia de la basura, donde mafioso es el que paga, mafioso es el que transporta y mafioso el que recibe. Hoy día una labor titánica con todos los actores para clausurar 54 de estos vertederos y transformarlos en parques para la comunidad”.


Elizabeth Ortiz