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Guadalajara, Jalisco.

Las obras en la estación Basílica de la Línea 3 del Tren Ligero en Zapopan, tienen 16 meses que arrancaron, tiempo en el que se bloqueó el paso de autos y de transporte público en las avenidas Américas, Ávila Camacho y Aurelio Ortega.

La meta que se  trazó el Sistema de Tren Eléctrico Urbano (Siteur) es que la estación más importante en Zapopan quedará lista en febrero próximo, pero los vecinos de las colonias Seattle, El Capullo, Maestros y el Centro Histórico, tienen serias dudas de que se cumpla la promesa, explicó el arquitecto José Javier Gómez Álvarez, vecino de la zona.

Sobre todo, a los habitantes que forman parte del Colectivo Colonias Unidas les preocupa un predio que aún no se libera, situado en la esquina de Ávila Camacho y Santa Rita, explicó José Javier Gómez Álvarez, doctor en urbanismo.

A juicio de los colonos, es una irregularidad grave que el predio de Ávila Camacho y la calle Santa Rita, siga sin ser intervenido por los constructores de la estación Basílica, según detalló José Carlos Pelayo, integrante del Colectivo Colonias Unidas.

Junto a la estación Basílica se construye un túnel vehicular en el lugar y todo parece indicar que no estará listo en febrero de 2017, fecha anunciada por el Siteur.