Guadalajara, Jalisco.
En medio de la polémica que se ha desatado por una eventual reforma a la Ley de Pensiones del Estado, a la cual los trabajadores de Jalisco se han mostrado en completa oposición, surge un nuevo debate: aumentar el porcentaje de aportaciones.
De acuerdo con un estudio realizado por Valuaciones Actuariales del Norte, con sede en Saltillo, Coahuila, sólo con esa estrategia se podría aumentar la vida útil para el Instituto de Pensiones del Estado de Jalisco: el Ipejal.
Dicha institución ha sido centro de debate en la actual administración, al develarse una serie de desfalcos multimillonarios que hoy tienen en prisión a ex funcionarios de primer nivel en la administración pasada.
Hoy, el director del Ipejal, Héctor Pizano, fue notificado por esa consultoría actuarial que el periodo de suficiencia del fondo de pensiones durante el cual los gastos se podrán cubrir con recursos propios, aun considerando la reserva técnica, abarcará hasta 2031.
Es decir que, de seguir con la tendencia actual, al Ipejal le restan nueve años de vida útil antes de que el Gobierno de Jalisco tenga que entrar a apoyarlo con recursos de su presupuesto.
El estudio actuarial concluye que el déficit de la generación actual de trabajadores y pensionados es de 334 mil 997 millones de pesos, por lo que “de no tomar medidas correctivas, condena a la institución a una descapitalización, pues el monto de egresos por concepto de pensiones seguirá creciendo hasta alcanzar niveles económicamente inaceptables”.
Esa situación pondría en riesgo la seguridad económica de los actuales y futuros pensionados, “e incluso la fuente de trabajo que da origen al sistema de pensiones”.
Ante esa realidad, la consultora recomienda “medidas adicionales” para que no ponga en riesgo su viabilidad financiera. Ahí es donde destaca la necesidad de una reforma y “establecer las cotizaciones de la nómina del personal activo del 56% del año 2022 al 2065 y del 53.3% en adelante, en lugar de las aportaciones que se establecen en la Ley”.