Luego de la presión mediática por los ajustes presupuestales que reflejaron un aumento de 9 mil pesos brutos en su salario, el Pleno del Congreso aprobó un ajuste al tabulador.

Para Ismael del Toro Castro, coordinador de la bancada de Movimiento Ciudadano (MC), este capítulo no mancha la imagen del Congreso ya que las bancadas lograron ponerse de acuerdo para atender el reclamo social.

Del Toro indicó que ese dinero que dejarán de percibir tendrá que ser reorientado a otras partidas y lo que alcanzaron a cobrar durante dos meses cada diputado decidirá si lo dona o lo reintegra al erario.

La polémica subió de tono, al grado de que en una reunión privada los diputados reprocharon errores administrativos al secretario general del Congreso, Jesús Reynoso Loza, quien incluso puso la renuncia en la mesa ya que no estaba dispuesto a admitir esa responsabilidad. 

Al final, todo quedo en un amago y el secretario general no se fue.

Seguirá en su cargo, cobrando el mismo sueldo de 60 mil pesos netos al mes que se le asignó desde octubre de 2015, ya que el ajuste al tabulador también se le aplicará a él.