El informe de gobierno de Aristóteles Sandoval presenta datos que no tienen nada que ver con lo que se informó, sobre todo en temas de transparencia y fiscalización, cuestionaron académicos, quienes señalaron que el Poder Ejecutivo confunde términos y ofrece información incompleta.

José Bautista Farías, del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), señaló que se citan indicadores de años anteriores, como el índice nacional de corrupción del 2010 o como el índice de disponibilidad de información fiscal, que no tiene que ver como tal con rendición de cuentas.

Y en el capítulo dedicado a la Contraloría de Jalisco, no se especifica información de cuáles dependencias son auditadas ni mucho menos los hallazgos ni a quien se aplicaron 427 procedimientos sancionatorios, explicó José Bautista.

El coordinador de la Maestría en Transparencia de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Gilberto  Tinajero Díaz especificó que “los tres grandes pilares de la reforma constitucional eran la transparencia, la protección  de datos personales y la ley de archivos. No podemos seguir declarando los sujetos obligados inexistencia de información cuando no hay evidencia fehaciente que existan  catálogos en un marco normativo, pero también un marco legal. Rendición de cuentas sin sanciones ejemplares es un cuento que los ciudadanos ya no nos creen”.

Los investigadores lamentaron que en el informe, también se confunden términos de participación ciudadana con atención ciudadana o transparencia con rendición de cuentas, a pesar de que no son lo mismo.