La varicela es una enfermedad contagiosa causada por el virus de la varicela-zoster, un tipo de herpes. Un padecimiento que de acuerdo a cifras obtenidas en el Hospital de Primer Contacto de Colotlán está presente en la población y en los últimos dos meses ha infectado a 14 personas, explicó Jaime Rodríguez Ochoa, residente de tercer grado de Pediatría que presta sus servicios en dicho hospital.
“Bueno su tendencia es meramente estacional, vemos un pico de incidencia a finales de invierno y principios de primavera es cuando más vemos este tipo de casos. Actualmente en el hospital tenemos 14 casos registrados de los cuales 12 de ellos son en menores de 18 años y dos en mayores de esta edad. Lo importante es que no todos los pacientes que llegan a padecer a la varicela acuden al hospital y por eso no tenemos una cifra exacta de cuánta es la densidad poblacional afectada”, dijo Rodríguez Ochoa.
Generalmente es una enfermedad leve, caracterizada por una erupción cutánea que produce picor y se presenta en el rostro, el cuero cabelludo y el tronco, con granos de color rosado y ampollas diminutas llenas de un líquido. El cambio de estaciones favorece las condiciones para desarrollar el padecimiento, reiteró el residente de Pediatría quien explicó además qué panorama epidemiológico nos depara.
“Realmente la cifra no la tengo clara pero es importante mencionar que el año pasado la cifra fue oscilante, entre uno y dos pacientes por mes, realmente no hubo un repunte importante el año pasado pero en esta parece ser que si ha habido un pico de incidencia un poco más alto que en años anteriores”, agregó
Aunque no son muy comunes, se pueden presentar complicaciones, especialmente entre los niños y los adolescentes, así como las personas con un sistema inmunológico debilitado.
Los infantes son quienes más la padecen pero el ser humano puede desarrollarle más de una vez, explicó el pediatra.
La varicela se transmite directamente de persona en persona al tocar las ampollas de alguien infectado o a través de saliva o flujos nasales.
Para prevenir una propagación, las personas infectadas deben quedarse en casa y recibir la atención médica oportuna.
El riesgo latente a presentar casos obliga a no bajar la guardia, estar atentos a los síntomas y acudir a la unidad médica especializada, concluyó el pediatra.