Zapotlán el Grande, Jalisco.
Corría el invierno del 2010 cuando el Parque Nacional Nevado de Colima se vistió de blanco, esta es última nevada de gran magnitud que a la fecha se ha registrado, la caída de nieve se observó hasta la zona conocida como “La Joya”, la nieve en algunos puntos alcanzó los dos metros de altura y permaneció hasta aproximadamente el mes de mayo; desde entonces, no se ha registrado una nevada de esta magnitud, detalla Gerardo Bernabe Aguayo, presidente del Nevado de Colima y Cuencas Adyacentes.
Desde hace trece años, en esta área natural protegida, sólo ha habido caída de granizo, aguanieve y en 2019 una ligera nevada que en poco menos de 5 días se derritió.
El cambio climático es el motivo, las causas son muchas y se presentan de distintas maneras según la zona, sin embargo, todo es consecuencia de la actividad humana. Para casos como esta región Sur, el cambio de uso de suelo, la tala ilegal y el crecimiento acelerado de la agroindustria, son la más clara evidencia.
El ver el Parque Nacional de blanco, no sólo es un atractivo, lo más importante es que genera una reserva de agua para la flora y fauna del lugar, pero además provee de servicios ambientales a quienes viven cerca del lugar.