Biólogos del CUCBA encuentran fósiles de insectos en Tesistán
Fotografías: cortesía




 Guadalajara, Jalisco.

¿Te imaginas que de niño te encantaban los dinosaurios y todo lo que tenga que ver con el mundo jurásico, vives en una zona que dicen que hay fósiles y cuando creces estudias biología y te especializas en paleontología y haces un descubrimiento que nadie más ha hecho?

Pues esa es la historia de José María Hernández Sanches, biólogo del Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias quien junto a su maestro y al curador de los fósiles registraron por primera vez en Jalisco fósiles de insectos y arácnidos que fueron hallados en las inmediaciones del Cerro de la Col en Tesistán, en Zapopan.

“Para empezar la zona con fósiles yo la encontré cuando era muy niño en el 2003 entonces digamos que siempre tuve en cuenta la existencia de los fósiles.

Pero no fue sino hasta cuando estudié la carrera de biología que tuve la herramientas necesarias para entender el contexto biológico, geológico, que me di cuenta de la importancia y que no había ningún estudio previo en la zona”.

Se trata de fósiles de 12 insectos y una araña recolectados tras incursiones en el cerro que se encuentran en buen estado de preservación al estar impresos entre sedimentos y piedra caliza, además de capas de tierra:

“El nivel de conservación es muy bueno incluso se alcanzan a ver muchos detalles de los ojos, de las alas, de algunas otras estructuras, que serían difíciles de preservar incluso en ejemplares fósiles más grandes”.  

Son escarabajos, una chinche, una araña y una mosca. Se estima que estos fósiles son originarios de la época del Plioceno, que tienen entre 3.6 y 5.2 millones de años, el profesor de paleobiología del Departamento de Botánica y Zoología del CUCBA, Margarito Mora Nuñez, explica la importancia de este descubrimiento:

“Lo que hace único a este descubrimiento es que es el primer registro de insectos fósiles para Jalisco y lo que pasa es que los insectos es muy difícil que fosilicen por su esqueleto tan frágil.

Por su tamaño y la mayor parte de insectos fósiles están en ámbar que en el sureste de Chiapas hay muchos ejemplares.

Pero los fósiles de aquí que se encontraron son fósiles, que son moldes, vaciados mucho más difíciles de hacer o de generarse pero las condiciones que ayudaron a generarse es que es un grano muy fino se puede ver en las lajas, ese grano permitió que pudieran formarse como tal”.

“Algunos ejemplares si son realmente pequeños hay escarabajos de unos cinco, seis milímetros de largo, entonces eso los hace extraordinarios en el sentido de que tienen muchos detalles que sería muy difícil que fosilizaran”.

Por su parte, el coordinador del Centro de Estudios de Zoología y el Curador de la Colección del CUCBA, José Luis Navarrete Heredia, detalla que este hallazgo ya fue publicado a nivel internacional.

Por cierto en la única revista del país de entomología hecha en el CUCBA y que forma parte de un acervo científico internacional, se trata de la revista Dugesiana:

“En esta revista se publicó este trabajo y como revista científica pasa por un momento de arbitraje, por especialistas en el área que hace observaciones y que en el último de los casos dan el veredicto de si se acepta, se rechaza o que pasa con los manuscritos.

Revisión por pares que le llaman, revisión por pares”.

Los fósiles forman parte de la Colección Paleontológica del Centro de Estudios en Zoología de la Universidad de Guadalajara, donde se resguardan entre mil 500 y dos mil piezas a la espera de ser completamente registradas, documentadas e identificadas.

  • Estos fósiles encontrados en Tesistán no son todo lo que se descubrió, hay más, como restos vegetales pronto serán dados a conocer, pero todavía hay mucho por explorar en las inmediaciones del Cerro de la Col de Tesistán en Zapopan.

Rocío López Fonseca