Guadalajara, Jalisco. 

El Cerro de la Reina, en Tonalá, no solo es un área natural que debe ser protegida, ni solo es un parque, sino que se trata de un sitio histórico para la ciudad,

ya que ahí se libraron batallas entre los grupos indígenas y los españoles,

advirtió Teresa Figueroa, maestra de literatura e integrante del colectivo Defendamos el Cerro de la Reina.

La docente y gestora cultural acudió al foro realizado en el Congreso del Estado, para conocer por qué ese sitio debe ser protegido y no debe anexarse a la Agencia Metropolitana de Bosques Urbanos (AMBU).

El Cerro de la Reina tiene por los menos cinco símbolos de la identidad cultural de Tonalá:

• Ahí está la piedra encantada, la piedra de la campana, la ermita de Guadalupe (iglesia), el monumento a Cihualpilli y el asta bandera monumental, explicó la maestra. 

“La importancia histórica del cerro es fundamental para todo Jalisco, ahí empezó la conquista y la colonización de nuestro estado.

Esto, creo que no ha sido suficientemente (valorado), en otro lugar un espacio así donde hubo esta guerra y donde hubo estas batallas épicas, desde luego que es un sitio histórico fundamental que tendría que ser respetado y sumamente cuidado”, subrayó. 

Carlos Iván Chávez, ingeniero en recursos naturales por la Universidad de Guadalajara (UdeG) y representante del colectivo Tonalá, explicó que el cerro de la Reina es un sitio de infiltración de agua, que forma parte de la cuenca del río Osorio, la única a cielo abierto que hay en la ciudad.  

Si el cerro llegara a urbanizarse, se perdería un sitio de recarga de acuíferos, dijo el experto.

“De urbanizarse (el cerro), ya no tendría esa función, así como tiene la función de formar cuenca, estos arroyos, ríos y manantiales, tiene también la función de mantener con vida una de las grandes fiestas de Tonalá, que es

la de Las Crucitas, que es una veneración en los pozos de agua, son 16 pozos y la infiltración hídrica,

que es la que mantiene con agua a los pozos”, explicó.

El urbanista Alejandro Mendo, primer presidente del Consejo Ciudadano Metropolitano, recomendó que la AMBU cambie su diseño institucional, porque hoy ese organismo privilegia el uso comercial de los 13 parques que administra, en lugar de contar con un modelo participativo que incluya a los habitantes en la toma de decisiones.

“A los miembros del Consejo Ciudadano Metropolitano de Guadalajara, más grupos locales, colectivos, ciudadanos,

que se aboquen al diseño de un modelo participativo de gestión metropolitana de estos parques y bosques urbanos,

para lograr incorporar vinculantemente a los representantes ciudadanos, no solo a los funcionarios municipales o actores en turno, como actores decisorios dentro del órgano colegiado de la AMBU”, precisó.

La diputada de Futuro, Mariana Casillas, quien fue la moderadora del foro, dijo que con la información obtenida se definirá una ruta legal para que el Congreso expida reglas que logren que el Cerro de la Reina sea un sitio de protección natural, alejado de intereses mercantiles.