Los Ángeles, Estados Unidos. 

Más de un millón de inmigrantes en Estados Unidos podrían enfrentar un futuro incierto. 

Se trata de los beneficiarios del Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés), un programa que permite a inmigrantes de países en crisis humanitaria, como Venezuela, Honduras y El Salvador, vivir y trabajar legalmente en Estados Unidos.

Con la llegada de Donald Trump a la presidencia en enero de 2025, crecen las dudas y temores sobre el futuro de este programa. 

Sabemos que Donald Trump tiene la intención de terminar el programa de TPS. Ahora, el problema es que basado en esas situaciones, no sabríamos qué países fueran a ser terminados.

Si Trump decide poner fin a las protecciones del TPS antes de tiempo, es probable que enfrente desafíos legales. 

El proceso para la terminación del TPS llevaría algún tipo de batalla legal, como ya lo vimos anteriormente, en el caso del presidente Trump y su primer intento de terminación del TPS.

Una corte estuvo favorable a la terminación y el litigio se encontraba pendiente al momento de que el presidente Biden tomó la Casa Blanca, el cual decidió desestimar la demanda y eso fue lo que mantuvo hasta el día de hoy este programa vigente.

Según las leyes actuales, las agencias del gobierno deben confirmar que el país de origen de los beneficiarios es seguro para su regreso antes de poder revocar el TPS.

Sin embargo, existen dos maneras principales en las que podría intentar eliminar el TPS:

La primera es ordenar al Secretario de Seguridad Nacional que no renueve el TPS para ciertos países.  

La segunda opción es solicitar al Congreso que elimine completamente el programa. No obstante, los expertos consideran que esta vía es poco probable. 

El presidente Joe Biden ha enfrentado presión para extender o renovar el TPS para algunos países, buscando proteger a los inmigrantes antes de que Trump asuma la presidencia. Hasta la fecha de publicación, no se ha tomado ninguna decisión.

Aunque Trump podría intentar revertir estas acciones, una extensión o renovación por parte de Biden daría a los migrantes una base más sólida para desafiar las órdenes de Trump en los tribunales.

Ante la incertidumbre sobre el futuro del programa, los expertos recomiendan que los beneficiarios actúen desde ahora. Señalan que el TPS generalmente se extiende dos meses antes de su vencimiento y tiene una duración de 18 meses, lo que ofrece tiempo para prepararse ante posibles cambios.

Es importante entender que si usted tiene TPS, debe evaluar qué posibilidades tiene para mantener otro estatus legal o hacer una solicitud, ya sea por matrimonio, por medio de hijos.

Al mismo tiempo, hay que evaluar posibilidades de asilo o de visas de empleo o inversión. Es importante no esperar a que haya una decisión negativa, sino tomar proactividad y evaluar su caso migratorio.

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