La oficina del Ombudsman mexicano apremió este martes a que concluyan "con la mayor celeridad posible" las investigaciones oficiales sobre un enfrentamiento que dejó el viernes 42 presuntos narcotraficantes y un policía muertos, que generó denuncias de abuso de la fuerza.

"La gravedad y trascendencia de las imputaciones que se formulan demanda que las investigaciones se lleven con la mayor celeridad posible, sin afectar la seriedad y responsabilidad que se requiere", reclamó la Comisión Nacional de Derechos Humanos (Ombudsman) en un comunicado.

La propia Comisión envió el viernes a observadores al rancho de Tanhuato (estado de Michoacán, oeste) donde se desató la balacera entre fuerzas de seguridad y presuntos miembros del poderoso cártel Jalisco Nueva Generación, que en semanas anteriores había matado a una veintena de policías en varios ataques.

Este martes, la Comisión anunció la apertura formal de su propia investigación y solicitó a las autoridades "la rendición de informes pormenorizados" para "conocer la verdad" de lo que ocurrió en la balacera, una de las más mortíferas de la lucha antidrogas de los últimos años en México.

El gobierno mexicano ha rechazado categóricamente las sospechas de que algunos de los presuntos narcotraficantes pudieron haber sido ejecutados por la policía en el rancho, asegurando que las pruebas forenses determinaron que los 42 muertos habían disparado armas y se habían negado a rendirse.

De su lado, algunos expertos en seguridad han expresado dudas sobre la actuación policial, cuestionando por qué sólo tres presuntos criminales habrían aceptado rendirse -quienes fueron detenidos- y no hubo ningún herido.

Algunos familiares de los muertos incluso acusaron a las fuerzas de seguridad de cometer "una masacre" en el rancho, cercano a la frontera con el estado de Jalisco.

La Comisión dijo que "repudia el clima de violencia e inseguridad que en los últimos meses se ha vivido en algunos estados" mexicanos, en los que se han vivido "diversos hechos que demandan ser plenamente aclarados".

Además de Tanhuato, la Comisión también recuerda el caso ocurrido el pasado 6 de enero en Apatzingán, también en Michoacán.

La fiscalía y el departamento de Asuntos Internos de la policía federal están investigando reportes periodísticos que indican que agentes asesinaron a 16 civiles desarmados en Apatzingán, donde milicias de autodefensas se habían levantado en armas en 2013 contra el cártel Los Caballeros Templarios.

Autoridades dijeron en un primer momento que en Apatzingán hubo nueve muertos en un tiroteo entre policías y algunos exmiembros de las autodefensas.