Guadalajara, Jalisco.
Una parálisis económica en Estados Unidos, es la principal amenaza para la industria automotriz de México.
La retirada de inversiones de Ford y General Motors por presiones del presidente estadounidense, Donald Trump, no significa un perjuicio para este sector, a menos de que sea el presagio de una crisis para la nación vecina, expuso el presidente de la Industria de Autopartes, Oscar Albín.
El presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz, Eduardo Solís expuso que este sector en México es "poderoso", y tiene condiciones para continuar su éxito.
El año pasado exportó casi 100 mil millones de dólares y generó 55 mil millones de dólares de divisas netas, cantidad que no es superada por los dólares captados por el turismo, la exportación del petróleo y las remesas en su conjunto.
Consideró que no se debe temer por la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), porque al final es necesaria.
Eduardo Solís advirtió que se tiene que actuar con prudencia y esperar antes de caer en pánico.
Hasta el momento no hay señales de que más empresas retirarán su inversión del cuatro exportador y séptimo fabricante de automóviles del mundo.
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