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Washington, DC, Estados Unidos.

En medio de una lluvia y alrededor de las 11 de la mañana (Hora Centro), el presidente electo Donald Trump juró ante la biblia, cumplir sus funciones como presidente, y como tal, habló por primera vez a la nación.

En sus primeras palabras, el cuadragésimo quinto presidente agradeció al juez, expresidentes, ciudadanos de Estados Unidos y a todo el mundo.

Indicó que como país, buscarán la reconstrucción de éste “Nosotros los ciudadanos estamos unidos a un esfuerzo nacional para reconstruir el país y restaurar sus promesas para todo nuestro pueblo”, afirmó que juntos determinarán el rumbo del país durante muchos años.

Expresó que cada cuatro años se reúnen en Washington para transferir el poder, “nos sentimos agradecidos con el presidente Obama y la primera dama Michelle Obama por su asistencia en esta transición, han sido magnifico, gracias”.

Afirmó que esta transición era especial, porque no solo se hizo la transferencia del poder de un gobierno a otro, si no de Washington al pueblo.

Señaló que no importa qué gobierno esté al frente del país “Lo que realmente importa no es qué partido controla el gobierno, si no el Gobierno es controlado por el pueblo. El 20 de enero de 2017 será recordado como el día en que el pueblo asumió nuevamente el control de esta nación”

Señaló que durante muchos años se ha beneficiado empresas de otros países, “durante muchas décadas hemos enriquecido a empresas foráneas a expensas de las nuestras, subsidiado los ejércitos de otros países permitiendo el deterioro triste de nuestras fuerzas armadas, hemos defendido las fronteras de otras naciones rehusándonos a defender las nuestras”

Afirmó que se han gastado billones de dólares en el extranjero mientras la infraestructura de EEUU se desbarata.

“Cada decisión sobre comercio, impuestos, inmigración, asuntos internacionales se tomará para beneficiar a los trabajadores y a las familias estadounidenses, debemos defender a nuestro país de otras naciones” expresó.

Explicó que el país tendrá dos reglas fundamentales: “compra de productos hechos en EEUU y contrata trabajadores estadounidenses”. Afirmó que se buscará buenas relaciones con otros países, pero se hará bajo el entendido de “todas las naciones tienen derecho a poner sus intereses primero”.

Indicó que revitalizará las viejas alianzas y forjará nuevas alianzas, así como reunir el mundo civilizado contra el extremismo radical islámico que será erradicado de la “faz de la tierra”.

Finalizó “nunca más volverán a ser ignorados, su voz, sus esperanzas y sueños van a definir nuestro destino estadounidense. Juntos vamos a hacer que el país vuelva a ser fuerte, que EEUU vuelva a ser un país rico, orgulloso, haremos que sea un país seguro, y sí, juntos vamos a hacer que EEUU sea grandioso una vez más. Dios los bendiga, y Dios bendiga América”.