Paseos en camellos son una de las atracciones turísticas de mayor demanda en playas del pacífico mexicano
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Los Cabos.

A solo unos metros del océano Pacífico, este grupo de camellos descansa de su jornada laboral…

Estos animales llegaron a Los Cabos en 2018, como resultado de ciertos cambios en la legislación mexicana, para convertirse en una de las atracciones turísticas de mayor demanda, que ofrece este destino de la península de Baja California Sur.

Jaime Alberto Bernal, veterinario:

“Aquí en México, las autoridades prohibieron que los circos tuvieran animales. Muchos dueños no sabían qué hacer con ellos y varios camellos terminaron en ranchos o instalaciones protegidas”.

En febrero de 2021 nació el primer dromedario de la zona, un albino de 35 kilos y algo más de un metro de altura. Fue bautizado como ‘Pumba’ hijo de Gaga y vive aquí, en el Rancho San Cristóbal, junto a otros nueve camellos.

“Somos uno de los principales ranchos que reproducen camellos en México. Aunque la reproducción es relativamente sencilla, requiere conocimientos específicos”.

Aunque muchos creen que los camellos provienen solo del Medio Oriente y el norte de África, su verdadero origen está en Norteamérica.

“Es decir, México, Estados Unidos y Canadá. Aquí se originó la especie. Con el tiempo, las condiciones climáticas cambiaron y los camellos migraron a Asia a través del estrecho de Bering”.

Debido a que su participación en actividades turísticas y recreativas ha generado cuestionamientos sobre el bienestar animal, empresarios dedicados al cuidado y manutención de estos ejemplares aseguran que aplican estrictas medidas que garantizan su bienestar.

Alejandro Ramírez Celestino, gerente del rancho:

“Queremos que los visitantes conozcan nuestras instalaciones y vean que los camellos participan voluntariamente. Aplicamos refuerzos positivos y les proporcionamos amplios espacios con sombra, agua y comida”.

Cada camello trabaja un máximo de 80 minutos al día en intervalos de 20 minutos. Además, el peso de los turistas se distribuye según la complexión de cada animal.

Levi Andrade, guía:

“Somos de los pocos destinos con este tipo de experiencia. Durante el recorrido, compartimos información sobre la anatomía de los camellos y su historia”.

  • En México, los ranchos que albergan camellos están bajo la supervisión de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y, constantemente, veterinarios especializados monitorean el bienestar de los animales y vigilan estrictamente las regulaciones para su importación.

Paula Díaz, Voz de América, Los Cabos.