Más de 100 maestros siguen en lucha para ser reinstalados en el Colegio de Bachilleres
Foto: Ignacio Pérez Vega




Guadalajara, Jalisco. 

Ya han transcurrido cuatro años y cinco meses, desde que se concretó el despido de 112 profesores del Colegio de Bachilleres. Desde enero de 2021, exigen su reinstalación y todo parece indicar que se ve una luz al final del túnel.

Existe la posibilidad de que se de un acuerdo entre el gobierno federal y el gobierno de Jalisco, para que se les regrese su empleo y se les paguen los salarios caídos, informó Javier Ávila Esparza, ex dirigente del Sindicato Único de Académicos del Colegio de Bachilleres.

Más de 100 maestros siguen en lucha para ser reinstalados en el Colegio de Bachilleres

Foto: Ignacio Pérez Vega

El maestro Javier también forma parte del grupo de profesores cesados por el Colegio de Bachilleres. Todo se debió, dijo el docente, a una venganza política, ya que el gremio mantuvo una postura crítica desde que se autorizó la Reforma Educativa. Responsabilizan de ello al ex gobernador Enrique Alfaro.

“A través de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) se tiene un diálogo con el gobierno federal, donde el asunto de nosotros parece que ya está avanzando.

Ya incluso la doctora Claudia (Sheinbaum) ya lo comentó hace un mes en una mañanera de la resolución de un acuerdo con el gobierno del estado para la reinstalación de 97 compañeros, de los 112 que estamos. Están hablando de agosto para la resolución, donde estamos exigiendo el pago de todos los salarios caídos”, refirió.

La maestra Azucena González Cortés, era maestra en el plantel de Betulia, municipio de Lagos de Moreno, Jalisco. Ella daba diversas materias del área de Humanidades y Comunicación y un día, sin explicación, la despidieron.

Más de 100 maestros siguen en lucha para ser reinstalados en el Colegio de Bachilleres

Foto: Ignacio Pérez Vega

“Es lo que no sabemos, fuimos cesados injustamente, solamente nos llamaron un día llegando de trabajar y nos dijeron que estábamos despedidos,

que no podíamos presentarnos a la escuela, de hecho acabábamos de llegar de dar clases y de pronto, nos llaman y nos dicen que no podemos ingresar a la escuela. Eso fue un viernes y nos dijeron que el lunes ya no nos presentáramos.

Esto fue en plena pandemia, nos dejaron sin servicios, sin un ingreso y sin servicios médicos, en plena pandemia. Obviamente, hemos pasado situaciones muy, muy difíciles.

Hemos acudido a todas las oficinas gubernamentales a pedir que nos ayuden con esta situación, pero no hemos tenido respuesta”, relató.

  • La maestra Azucena, como sus compañeros cesados, la mayoría ha tenido que vender dulces, ropa o encontrar empleos temporales para subsistir. Sin embargo, confían en que se les hará justicia y regresarán a las aulas.

Ignacio Pérez Vega