Guadalajara, Jalisco.

En proceso abreviado, donde aceptó su responsabilidad para alcanzar una penalidad baja y, de paso, un beneficio de ley, el último de los 14 detenidos que quedaba en prisión ligado al homicidio del ex gobernador Jorge Aristóteles Sandoval, alcanzó la libertad.

Cerca del 25 de junio se cerró la investigación y, en menos de dos meses, quedó fuera. Se trata de Raúl “N”, el último en ser detenido y con la acusación por un delito que podría considerarse como el más grave de los que estuvieron en la lista.

El resto, 11 hombres y dos mujeres, eran empleados del Bar Distrito 5 y fueron imputados por modificar la escena del crimen, tras el artero asesinato del ex gobernador en el baño del lugar.

Ellos reconocieron su responsabilidad en el delito de encubrimiento y tuvieron una reducción de la pena, pagaron una multa de cuatro mil pesos y obtuvieron su libertad en semanas.

Raúl “N” fue detenido el 22 de diciembre de 2020 cuando intentaba escapar de la torre habitacional de lujo Icon, de Puerto Vallarta, en un automotor presuntamente usado el día del asesinato, que fue atribuido a otras dos personas: un hombre y una mujer, como autores materiales.

Fue vinculado a proceso por cohecho, después de que ofreció dinero para que lo dejaran libre, y quedó a disposición del Juez de Control, que el 29 de diciembre lo vinculó a proceso por ocho meses.

Sin embargo, nunca lograron encontrar elementos que lo vincularan al homicidio y el mismo imputado solicitó al juez de Control y juicio Oral, Luis Ignacio Ceja Arias, una audiencia por adelantado donde aceptó su responsabilidad menor en el delito de cohecho, lo que redujo la pena que iba de 2 a 12 años de prisión y quedó en un margen de uno a 6 años de cárcel, lo que le permitió, como lo hizo valer, el beneficio de suspensión del proceso.

Así, a prácticamente nueve meses de cometido el homicidio del ex mandatario, oficialmente ya no hay nadie detenido respecto a este caso.