Buenos Aires, Argentina
Un 'tampón-globo uterino' para frenar hemorragias tras un parto, un mecanismo de detección de cáncer o un escáner detector de composición de alimentos, fueron algunas de las innovaciones presentadas en una jornada internacional de inventores este miércoles en Buenos Aires.
Ante la mirada atenta de inversionistas, la jornada "Idear soluciones para mejorar vidas", organizada anualmente por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y por primera vez en Argentina, permitió escuchar a creadores que, con sus productos revolucionarios, buscan facilitarle la vida cotidiana a la gente e incluso salvar vidas.
"Soy diseñadora industrial, trabajé varios años en grandes empresas en Nueva York, pero un día me sentí vacía", contó a la AFP Diana Sierra, una emprendedora colombiana de 36 años, que se dio cuenta que "los objetos pueden salvar vidas", hizo las maletas para dejar el mundo desarrollado y partió hacia África con la idea de "democratizar el diseño", dijo.
En África vio que muchas mujeres y niñas perdían días de escuela o de trabajo una semana por mes debido a la falta de medios para protegerse durante su período de menstruación e ideó una toalla sanitaria "que se puede lavar y rellenar con el material que uno quiera. Después lo transformé en una bombacha (braga)", contó sobre su original diseño de ropa interior.
El invento ya llegó a 9 mil niñas en 34 países, precisó esta mujer convencida de que "para hacer tecnología revolucionaria no se necesita mandar a alguien a la luna, es suficiente con mandar una niña a la escuela", afirmó.
- RX a la comida, prótesis 3D -
En otra presentación, Isabel Hoffman propuso protegerse del "fraude alimenticio", la consigna que movilizó a esta inventora, fundadora de la empresa Tellspec que desarrolló el primer escáner de alimentos, un dispositivo pequeño que permite detectar grasas, fibras, azucares o melamina en los productos.
Otras experiencias que sorprendieron a la audiencia reúnida en La Usina del Arte, un centro cultural al sur de Buenos Aires, fueron un sistema hecho con una suerte de pantalón para practicar urgencias en los partos o un sistema en red para que enfermos renales se garanticen servicios de hemodiálisis en cualquier lugar del mundo.
Con apenas 21 años, el argentino Gino Tubaro conmovió al contar su experencia con el diseño de prótesis con impresoras 3D, que le valió ganar el año pasado un premio de 60 mil dólares de History Channel.
"Estamos haciendo distintos proyectos anatómicos en paralelo, como un traductor de textos a braille, una remera antiinfartos, estamos viendo de crear una impresora 3D con los diseños precargados en la máquina. Pero nuestra primera meta es entregar las primeras mil manos (prótesis) gratis, ya entregamos 250", contó a la AFP.
Tubaro dijo tener la misión "de transformar a chicos con discapacidad en superhéroes" y emocionó a los innovadores.
- Sostén contra ataques de corazón -
Darle utilidad a las innovaciones, es uno de los objetivos de cada uno de los 14 jóvenes de América Latina que compitieron por un premio en el cierre del encuentro, tras ser seleccionados entre un centenar de participantes de 17 países.
La ingeniera costarricense Alicia Chong, junto a la diseñadora de interfaces Karen Ramírez, de México, y otros tres socios, idearon un sostén y/o brasier con circuitos sensibles que permite monitorear a distancia el corazón de mujeres con enfermedades cardíacas.
"Nos sorprendió saber que las enfermedades cardíacas son la primer causa de muerte de mujeres a nivel mundial. Había que hacer algo", dijo Chong.
Tras una mala experiencia laboral, Catalina N'Hayx, una argentina de 24 años que vive desde los 12 en México, ideó un sistema para monitorear a distancia equipos de soporte de vida, como incubadoras, máquinas de anestesia, explicó.
Motivados por intereses ecológicos, sanitarios o creativos, las innovaciones en competencia fueron desde una herramienta para detectar alteraciones visuales en niños a un sistema para ayudar a prevenir el dengue y el zika.
Mientras un participante ideó un sistema para limpiar miles de litros de agua con plantas de tratamiento, otros propusieron construir compactadoras para reciclaje de botellas plásticas o crear una plataforma de servicios financieros de reciclaje en red para el saneamiento de residuos.
Todas las propuestas deslumbraron, pero sólo un puñado será bendecido con el financiamiento necesario para desarrollar estos inventos.