Guadalajara, Jalisco.

En el marco de la Cátedra José Luis Lamadrid, titulada "¿Una nueva reforma electoral?", el consejero presidente del Instituto Nacional Electoral, Lorenzo Córdova, reiteró que en este momento no es necesaria una reforma electoral, no es pertinente y menos en vísperas de la elección más grande de la historia de este país del 2024:

"La elección del 2024 va a ser la elección más grande y probablemente la más compleja que hayamos organizado en la historia democrática del país, la más grande sin duda. Estamos estimando con una proyección del padrón electoral que para 2024 probablemente existan 97 millones de ciudadanas y ciudadanos como posibles electorales. Y además en 2024, por la concurrencia de elecciones locales con la federal, tendremos la disputa por el poder político más grande de nuestra historia, nunca antes se habrán elegido tantos cargos con el voto pupular como el 2024".

Reiteró que hacer una reforma electoral a machetazos saldrá muy caro para el futuro del país. Aseguró que se puede estar tranquilo, porque con las leyes electorales que existen habrá certidumbre en los resultados:

"Si no hay reforma electoral, estemos tranquilos, en 2024 el INE de la mano de los 32 organismos públicos locales electorales del país, nos van a dar los mexicanos una vez más la mejor elección tecnicamente organizada de nuestra historia, como ha venido ocurriendo a lo largo de estos 32 años. Toda elección implica una mejoría en términos de funcionamiento de los sistemas informáticos, de la aceptación ciudadana a participar, de la rapidez con la que fluyen los resultados electorales".

Señaló que la confianza de los ciudadanos hacia el INE es de más del 70 por ciento, porque la misma población participa codo a codo con las elecciones. Indicó que no se cierra a una reforma electoral, pero no ahora en vísperas a la elección tan grande como la del 2024 y estas reformas deben ser concensadas y aprobadas de manera unánime por todas las fuerzas políticas, pero más importante que se haga con la cabeza y no el estómago:

"Si hay una reforma, que sea el producto de diagnósticos adecuados, que se haga con datos ciertos, que se haga con datos objetivos, con diagnósticos reales, que sea una reforma hecha con la cabeza, no con el estómago o el hígado, si vamos a hacer una reforma a partir de filias o fobias políticas, o peor aún, de rencores personales, me la deben desde hace 17 años y ahora me la van a pagar, pase lo que pase va a ser una reforma que nos va a meter en problemas, va a ser una reforma regresiva".

Lamentó que hasta el momento ninguna fuerza política ha pedido información, diagnósticos o análisis del INE para realizar las propuestas de reforma electoral:

"De agosto a la fecha, a pesar de la intensidad del debate, el INE no ha recibido ni una sola solicitud de información, ni una sola, al INE no se le ha consultado donde están los problemas de la operación electoral, al INE no se le ha consultado cuáles son las fortalezas".