Santiago, Chile
Con unas 23 mil hectáreas devoradas por las llamas, Chile continúa soportando una feroz y temprana temporada de incendios forestales cuyo inicio registra este año un aumento de 54 por ciento de los siniestros, en relación al promedio del quinquenio, comentó el sábado la Corporación Nacional Forestal (Conaf).
Las altas temperaturas, con varias jornadas por sobre los 30 grados, y la sequía crónica que soporta hace ocho años el país son un cóctel letal para la propagación de incendios, que afecta en especial a la zona central incluida su capital, Santiago.
"Tenemos un adelantamiento sustantivo del periodo Conaf de incendios debido a las elevadas temperaturas y debido a la condición de ser Chile un país muy afectado por el cambio climático", comentó a la AFP Aarón Cavieres, director ejecutivo de la Conaf.
Cavieres destacó que se registró "un salto enorme en el número y superficie afectada por incendios. Desde julio de este año hemos tenido 669 incendios, comparado con el mismo periodo del quinquenio en promedio es un 54 por ciento más".
La superficie afectada suma unas "23 mil hectáreas", alertó el funcionario.
Sin embargo no se han registrado muertos y la afectación de viviendas ha sido mínima, con unas 12 casas afectadas, ya que el 70 por ciento de la superficie afectada estaba cubierta de pasto.
Este sábado 44 incendios forestales seguían activos en todo el país, 20 de ellos en "pleno combate y el resto más calmos", acotó.
En los últimos días la simultaneidad de incendios en la zona central puso en vilo a la población, con evacuaciones preventivas en la región de Valparaíso y Santiago, que el viernes soportó oleadas de humo intenso.
Para Patricio Pérez, experto en contaminación ambiental de la Universidad de Santiago, "se puede producir una acumulación, pero la tendencia normal de los incendios en esta época es que el humo suba rápidamente", sin generar los niveles de preemergencia y emergencia ambiental que la ciudad soporta en invierno.
El sábado el humo se dispersó en Santiago -un valle enclavado entre cerros y la Cordillera de Los Andes- pero la "alerta roja" por incendios sigue vigente en varios puntos de la zona central, incluida la región Metropolitana.
En este contexto, Cavieres se prepara "para un periodo altamente intenso, en el que el trabajo con la población va a ser vital", para bajar la siniestralidad, ya que el 99 por ciento de los incendios parten de la acción humana ya sea intencional o accidental.