Un juez español decretó este martes la devolución de su pasaporte al político mexicano Humberto Moreira, investigado por blanqueo de capitales, que podrá salir del país, después que la fiscalía decidiera no recurrir su decisión de dejarlo en libertad, informaron fuentes judiciales.
Moreira, expresidente del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) mexicano, había comparecido el 22 de enero ante el juez Santiago Pedraz de la Audiencia Nacional (principal instancia penal española), en el marco de una investigación contra él por blanqueo de capitales.
El magistrado consideró entonces que no había indicios suficientes de delito y lo dejó en libertad, pero le retiró el pasaporte y le prohibió salir del país a la espera de un eventual recurso de la fiscalía.
Tras pasar el plazo de cinco días y no haber apelación, el magistrado decidió devolverle el pasaporte, por lo que Moreira podrá salir del país.
El ministerio público decidió no recurrir porque para lograr que el tribunal estimase su recurso tendría que aportar datos que se encuentran bajo secreto y que, por ahora, prefieren que no se conozcan, según fuentes fiscales.
La fiscalía seguirá investigando y recabando más pruebas y si finalmente el caso llegara a juicio, se requiriría la presencia de Moreira, y en caso de que no viajara voluntariamente a España, las autoridades españolas podrían solicitar su detención a las mexicanas.
El juez consideró en su momento que habían quedado suficientemente acreditadas las transferencias de dinero por valor de 200.000 dólares a España, realizadas en 2013 por el político mexicano, que eran objeto investigación.
La fiscalía sospechaba que estos montos podrían haber servido para blanquear dinero procedente de delitos de corrupción política en México o del narcotráfico.
Durante su declaración ante el juez, Moreira defendió el origen legal de estas transferencias, que se realizaron a través de empresas suyas para cubrir sus gastos en España, según las mismas fuentes.
Moreira también negó cualquier relación con los Zetas, al ser preguntado por su supuesta vinculación con este cartel de narcotraficantes, como sospecha la fiscalía.
Éste había sido detenido el 15 de enero en el aeropuerto de Madrid-Barajas cuando iba a entrar en España.
Moreira estuvo al frente del PRI desde marzo hasta diciembre de 2011, determinado a devolver al partido del actual presidente Enrique Peña Nieto al poder que había ejercido durante décadas.
Sin embargo, tuvo que renunciar a la presidencia de esta poderosa formación política por acusaciones de corrupción y por las colosales deudas contraídas durante su gobierno en el estado de Coahuila (2005-2011).