Guadalajara, Jalisco. 

Hasta el 30 por ciento de los casos de rinitis, alergias y hasta asma en familiares de fumadores, podría ser por la exposición de segunda mano, es decir, por ser fumadores pasivos, advierte el jefe del servicio de Neumología y Fisiología Pulmonar del Hospital Civil Fray Antonio Alcalde, Gerardo Rojas Sánchez:

"Un familiar directo que convive con un fumador, ya hemos observado que también tiene efectos en los pulmones, que están relacionados con la exposición de segunda mano, así se les llamaba a los fumadores pasivos, pero los fumadores de segunda mano son los que se ven más afectados, porque han aparecido también problemas alérgicos, han aparecido otros problemas como rinitis, conjuntivitis, o sea otros problemas que no necesariamente tienen que ver con la función pulmonar también se ven afectados, se observan, se están observando".

Advirtió también que los niños que sufren del humo de cigarro por parte de familiares cercanos, provocan daños reales y permanentes en los infantes, provocándoles hiperactividad bronquial.

Y ¿cómo se diagnostica el daño pulmonar? El especialista explica que se realiza con una espirometría, este es un estudio sencillo y barato:

"Es un estudio muy sencillo que no solamente nos habla de un tamaño, sino de porcentaje de obstrucción, entonces es un estudio muy sencillo que podemos realizar para conocer exactamente cuál es la función pulmonar en ese momento, pero más a esto podemos realizar que respuesta tiene al tratamiento. Tenemos un estudio basal y una prueba al tratamiento y aparte sabemos si responde o no al tratamiento. El 80 por ciento de los pacientes que fuman en una etapa temprana ellos responden al tratamiento, hablamos que de diez ocho personas responden al tratamiento. Tienen una buena respuesta".

Y ¿quiénes se lo tienen que hacer?

"La prueba de espirometría en las personas que fuman y principalmente en quienes tienen tos por más de cuatro semanas y en aquellos que tienen problemas para respirar, esos son los dos principales datos clínicos que ya tiene que ir a hacerse una prueba, sin embargo, apostamos a que todos los que fumen que se hagan una espirometría, ahí es donde tenemos que mandar un poquito más el mensaje".

El costo de atención a las consecuencias de la salud de los fumadores en el sistema nacional de salud es millonario.

Finalmente, el especialista celebró que la nueva Ley Antitabaco llegó para proteger justamente a quienes estamos expuestos al estar cerca de quienes están fumando.