Washington, Estados Unidos 

Un retroceso en el acercamiento entre Estados Unidos y Cuba daría argumentos al ala dura del gobierno cubano contrario a la apertura y reformas económicas, alertó este martes un alto asesor del presidente Barack Obama.

"Es el peor momento posible para tomar pasos que den a los radicales en Cuba el argumento de que no vale la pena abrirse hacia Estados Unidos o reformar la economía y esos pasos serían retrotraer nuestra política", dijo el asesor de Seguridad Nacional, Ben Rhodes.

Las declaraciones de Rhodes siguen a la creciente inquietud sobre el futuro de las relaciones entre Washington y la isla cuando el 20 de enero asuma la presidencia Donald Trump, quien durante la campaña electoral amenazó con romper relaciones y revertir el proceso, si Cuba no se aviene a un acuerdo más beneficioso para Estados Unidos.

Rhodes resaltó que con el planeado traspaso de poder de Raúl Castro en 2018, y la muerte el pasado 25 de noviembre del padre de la Revolución Cubana, Fidel Castro, una nueva generación tomará las riendas de la isla por primera vez en medio siglo y "quisiéramos que continuaran con las reformas"

"Pero levantar el puente, y buscar exprimir y aislar al gobierno (cubano), y darles lecciones a distancia sobre la necesidad de los derechos humanos no ha funcionado", señaló durante una teleconferencia con periodistas.

Según el alto funcionario "nada sugiere que regresar a ese enfoque hará que las cosas mejoren, y de hecho solo ha servido para empoderar al ala dura en Cuba que quiere perpetuar" la persecución de grupos disidentes.

Estados Unidos y Cuba rompieron con décadas de animosidad al anunciar un acercamiento a finales de 2014. Dos años después un crucero, aviones comerciales, visitantes y hasta una bandera oficial estadounidense ondea en la isla.

Obama selló los avances en la relación bilateral con una visita en marzo de este año.