Washington, Estados Unidos
Donald Trump comenzó su jornada este sábado en Twitter con un ataque en toda regla a los dos diarios más respetados de Estados Unidos, antes de mantener importantes entrevistas telefónicas con varios dirigentes mundiales.
Sin que las razones de su cólera estén claras, el presidente estadounidense publicó a las 08H00 de Washington una serie de tuits en los que acusa a los periódicos The Washington Post y a The New York Times de ser "deshonestos". Las numerosas erratas de los mensajes dan cuenta de su enfado.
El presidente, que mantuvo este sábado sus primeras entrevistas telefónicas desde que se instaló en la Casa Blanca con los dirigentes japonés, alemán, ruso y va a hablar también con los mandatarios francés y australiano, prefirió llevar a cabo uno de sus habituales ataques contra los medios antes que comentar su primera semana en el poder.
Trump reprochó a ambos diarios "haberse confundido (con él) desde el principio y no haber cambiado de rumbo, ni ir a hacerlo jamás. DESHONESTOS", escribió.
El mismo tema se repite en los tres tuits, en los que, además, embiste contra The New York Times por "haber dicho que perdería las primarias y luego las elecciones generales ¡NOTICIAS FALSAS!".
El New York Times respondió brevemente en Twitter a las repetidas acusaciones de Trump, según el cual el gran diario "pierde abonados y lectores" escribiendo: "@realDonaldTrump verificación de los hechos: abonados y audiencia están en la cúspide. Apoyar el periodismo independiente es importante", tuiteó el servicio de comunicación del grupo de prensa.
Unos instantes más tarde la editorialista del Washington Post, Margaret Sullivan, contraatacó afirmando que los abonados "están también aumentando en el @Washingtonpost, donde la audiencia es más alta que nunca (y los hechos no son alternativos)".
Twitter es uno de los medios favoritos del presidente estadounidense, que cuenta con más de 22,5 millones de seguidores. En él abordar todo tipo de temas, desde los más insignificantes a los más trascendentales.
Las alertas automáticas de un tuit presidencial son indispensables tanto para la prensa como para los mercados bursátiles.