Cigarettes After Sex arma una noche de melancolía en Guadalajara
Fotografía: Héctor Navarro




Guadalajara, Jalisco.

Prácticamente en la semana que se anunció su presentación los boletos se terminaron. Su música es un secreto que poco a poco se ha ido extendiendo y que a pesar de hacer nula promoción en cuanto a marketing y su imagen, el proyecto ha ido de boca en boca, ahora se presenta en festivales y este fin de semana llegó por tercera vez a Guadalajara.

La banda originaria de El Paso, Texas, Cigarettes After Sex ofreció un concierto en el Guanamor Teatro Studio ante poco más de tres mil personas, en una noche repleta de blancos y negros, y no lo decimos metafóricamente, pues tanto los asistentes que iban en su mayoría con vestimenta negra, como las luces cálidas en el escenario, lucían únicamente en esos dos colores, de hecho, se le pidió a la prensa tomar las imágenes bajo ese formato para conservar ese misticismo en la presentación.

El proyecto es liderado por Greg González y aunque solo han publicado dos discos de larga duración y un Ep, sus seguidores siguen aumentando.

Poco después de las 9 de la noche los integrantes de la banda tomaron sus lugares. No había escenografía ni decoración alguna, solo ellos en una tríada semicircular ante batería, bajo y guitarra.

Una luz blanca se postraba sobre ellos que prendía por instantes para iluminar parte de sus rostros y en conjunto de un montón de humo, darle el matiz que necesita a su presentación, misma que arrancó con los dulces acordes de la canción de 'Crush', 'You're All I Want' y 'Nothing's Gonna Hurt You Baby'. La puesta minimalista ya estaba en marcha.

Al paso de su recital, tormentas, rostros y elementos naturales estilizados aparecían en unas proyecciones que transmitían una sensación de calma, contraria al griterío que emanaba sus fans al estarlos viendo.

"Se puede matar todo menos la nostalgia, la llevamos en el color de los ojos, en cada amor, en todo lo que profundamente atormenta y desata y engaña", reza una frase de Rayuela de Julio Cortázar y justamente eso, nostalgia es lo que transmite el universo musical de Cigarettes After Sex que con su estilo dream pop, tintes de dark wave, letras romántica y la voz calma y tenue de su vocalista, el manjar y deleite de quienes lo siguen.

Tras 14 canciones y poco más de una hora, el concierto llegó a su fin.


Héctor Navarro