Con menos autos que en la primera protesta, alrededor de 50 socios y conductores de Uber realizaron este viernes una caravana-manifestación, saliendo desde las inmediaciones del Estadio Omnilife, con destino final en Palacio de Gobierno.
Los socios de Uber exigieron que la empresa dé marcha atrás a la decisión de reducir 22 por ciento su tarifa y que frene la afiliación de más autos a la plataforma tecnológica, ya que superan las seis mil unidades, lo que saturó el servicio.
Jorge Ortega, vocero de Uber Justo, dijo que quieren tener un asiento en la mesa de diálogo del Congreso del Estado para regular el servicio y que no solo se escuche a la empresa.
Los socios y conductores fueron atendidos en la Secretaría de Gobierno, en donde participó el legislador local Alejandro Hermosillo.
Los manifestantes lograron que este lunes el gobierno estatal y el Congreso convoquen a representantes de Uber, por lo que habrá un nuevo diálogo en Palacio de Gobierno.
El gobierno estatal y el Congreso están conscientes de que se trata de un problema entre particulares, por lo que actúan sólo como intermediarios.