Guadalajara, Jalisco.

La Estrategia de Tejido Social que impulsa el gobierno de Jalisco tiene el presupuesto más bajo del sexenio.

Inició con 79 millones de pesos en 2019, el primer año de la administración estatal y para el 2023 llegó a tener 200 millones de presupuesto. Bueno, ya para finalizar el gobierno apenas tiene 60 millones de pesos, de acuerdo con los lineamientos de la Secretaría del Sistema de Asistencia Social para este año.

Este programa consiste en:

• Mejorar las fachadas de viviendas.
• Crear espacios de sana convivencia y espacios de reunión comunitaria
• Promover la integración, corresponsabilidad entre vecinos y mediación de conflictos
• Uso de espacios públicos de esparcimiento y ocupación de tiempo libre para promover la cultura de paz mediante actividades deportivas, musicales y artísticas.

De acuerdo con los lineamientos del programa publicados en el Periódico Oficial del Estado, si no hay afinidad entre los habitantes con su entorno, eso evita el sentido de pertenencia y genera descuido por falta de interés entonces en vez de tener un progreso personal, familiar y comunitario se convierte en un espacio nocivo. 

Una comunidad socialmente fragmentada se hace vulnerable en cuanto a seguridad, contaminación visual, sumado a factores como la ausencia de atención a servicios y propicia el ambiente para que la delincuencia opere más fácilmente porque

“es bien sabido que esta se apropia de espacios para la recreación y el esparcimiento y esto traer consigo un aumento en sus índices”, se lee en el periódico oficial de Jalisco.

Además, tener una vivienda adecuada no es solo cosa de cuatro paredes, sino del entorno, así lo establece el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de Naciones Unidas.