Guadalajara, Jalisco. 

El sueño de Isis Miren Urteaga Ramírez era ser doctora, en dos ocasiones hizo examen a la Universidad de Guadalajara, no salió en listas, pero había decidido estudiar enfermería. Altruista, activa, extrovertida, así era esta joven de 19 años, quien estaba a 15 días de iniciar sus estudios, cuando su ex pareja la asesinó. 

Fotografía: Cortesía 

El 22 de noviembre de 2020 fue asesinada por Salvador, y a más de tres años, la justicia por este feminicidio no ha llegado para su familia, quien hoy clama por ello.

“Pues en realidad fue una relación muy cortita, ellos se conocen como en mayo o en julio, inician una relación en julio, el 25 de julio,

una relación pues donde hubo varias cosas que ya eran como un detonante como un foco rojo,

entonces ellos terminan como 15 días antes de lo que pasa, entonces decía que él la iba a dejar estudiar sólo si se iba y venía a su casa, de él, él ya quería una familia,

él no quería que estudiara entonces, ella lo termina

 porque dice yo quiero seguir estudiando”, compartió su mamá, Sandra Ramírez

• Una de sus amigas relató que fue un noviazgo tortuoso, de apenas cuatro meses donde desde el inicio hubo violencia sexual y psicológica contra Isis. 

“Cuando ella empieza el noviazgo, empieza como a tener muchas peleas, era una persona que pesaba 60 kilos, y al final de su noviazgo pesaba unos 45 kilos,

o sea se adelgazó muchísimo y o sea tenían peleas desde que si estaba gorda, desde que tenía más mujeres la personas

, desde que estaba borracho y perdón, pues sí te mente la madre, o sea eran peleas repetitivas”. 

Las amigas y la familia de Isis salieron el pasado 8 de marzo a exigir justicia por su feminicidio, pues son más de tres años los que la defensa del presunto feminicida ha usado estrategias para dilatar el inicio del juicio oral, como:

Fotografía: Cortesía 

pedir que se les acepten pruebas que no presentaron en el tiempo de la etapa intermedia del proceso o cambios frecuentes de abogados para argumentar que no tenía defensa a la hora de que tocaban la audiencia. 

• Según Alejandro Franco, abogado de la familia, se han diferido al menos siete audiencias por esas razones.

Actualmente está vinculado a proceso por feminicidio, y a pesar de que la prisión preventiva no puede exceder de dos años, esto ha hecho que el agente del ministerio público pida alargar esta medida cautelar en al menos dos ocasiones. 

“Se va a aperturar la audiencia intermedia y ellos en vez de presentar pruebas están evitando que se llegue la audiencia intermedia, solicitaron actos de investigación,

en donde solicitan que se recabe la entrevista de un paramédico, en donde solicitan una dictaminación por medio de un médico perito particular,

en donde obviamente nos opusimos rotundamente a que ya presentaran ellos pruebas porque ya estaban a destiempo, ya habían pasado esos seis meses en donde ya debieron haber aportado las pruebas”. 

• El juez les negó la aportación de pruebas, pero apelaron ante el Supremo Tribunal de Justicia del Estado, quien hace más de un mes confirmó la decisión del juez.

La familia y sus amigas temen que la defensa recurra a más instancias para retrasar la llegada al juicio oral, y eso a su vez alargue el duelo que no han podido cerrar por la falta de justicia. 

“Decir ya cerrar este ciclo porque como sabemos, no sólo le quitan la vida a una persona, o sea se llevan a muchas personas, en este caso toda mi familia, sus amigas, sus amigos, más que nada es eso, yo ya sé como mamá que ya hay una sentencia”, manifestó su mamá. 

• Sus amigas también narraron lo difícil que ha sido cerrar la herida emocional frente a la impunidad. 

“Pues en cerrar la herida emocional que yo tengo porque yo tampoco no he podido como cerrar esa herida en estos cuatro años, pues obviamente me sigue doliendo que esa persona no tiene una sentencia todavía”. 

“Que no le fue suficiente arrebatarle la vida a nuestra amiga, arrebatarle la luz, arrebatar sus sueños a llevarse con todo eso a su familia, a sus amigos,

sino que aparte lo evade, se le hace fácil declararse inocente, entonces por mucho tiempo no se habló por respeto a su familia, hoy lo hacemos porque queremos justicia y eso es lo que nos mueve”.

Fotografía: Cortesía