Guadalajara, Jalisco.

El Museo del Periodismo y de las Artes Gráficas (MUPAG), ubicado en la conocida “Casa de los Perros”, este 11 de agosto ha cumplido 29 años de existencia.

Pero esta construcción, que complementa el panorama del Centro Histórico de Guadalajara, ha pasado por diferentes etapas para ser ese museo que hoy, recibe a cientos de visitantes.

En 1788, lo que hoy es la ‘Casa de los Perros’, comenzó como una pequeña finca construida por Don Mariano Valdés Téllez y Girón, editor e impresor de la Gaceta de México.

Esta construcción, estuvo dedicada principalmente a la impresión, de manera formal en 1792.

Tiempo después, es que sus muros atestiguaron el nacimiento del primer periódico insurgente en 1810, llamado “El Despertador Americano”, por iniciativa del héroe patrio Miguel Hidalgo y Costilla.

Desde ese momento, este lugar ya fungía como un espacio de suma importancia, para lo que posteriormente sería el progreso de los medios de comunicación en Guadalajara.

Uno de sus componentes más característicos, sin duda, son las estatuas de los dos canes de raza pointer que se encuentran a los costados sobre el edificio.

Estas estatuas fueron ordenadas a la empresa J. L. Mott Iron Works de Nueva York, y se mantiene la creencia de que representan a las mascotas de uno de los propietarios de este edificio en el pasado, el señor Jesús Flores Arreola, un empresario en el mundo del tequila.  

Ya en su etapa como museo, a este edificio le fue donada por parte de Jesús Álvarez del Castillo un linotipo, al igual que un estudio de televisión por parte de la empresa Televisa.

• También, fue parte de la producción fotográfica.

Entre los capítulos del hoy MUPAG, resalta cuando su edificio fue una más de las locaciones que fueron modificadas por el crecimiento de la ciudad.

En el siglo pasado, se amplió la calle que hasta el siglo XVIII se llamaba Santo Domingo, y hoy es Paseo Alcalde, y a causa de eso, la finca del museo tuvo una disminución, pues le restaron 9 metros de longitud en la parte frontal.

Después de todos estos sucesos, y ser un punto de referencia de la historia de Guadalajara, es que el 11 de agosto de 1994 comenzó a ser utilizado como un espacio expositivo.

Su colección permanente, fue conformada gracias a la Cámara Nacional de la Industria de las Artes Gráficas, delegación Jalisco (CANAGRAF), la fundación Álvarez del Castillo, e imprentas locales con varias generaciones. 

Y en conjunto a estas colecciones permanentes, es que la exposición de artes plásticas es una de las diversas apuestas que mantiene este edificio, así como la exposición de fotografía, la presentación de nuevos materiales literarios, y una divergencia de charlas y ponencias.

Aunque en 2016 tuvo que cerrar sus puertas a causa de la construcción de la Línea Tres del Tren Ligero.

Tuvo que ser reforzado ante daños estructurales generados por el paso de la tuneladora, para la ampliación de este transporte público, en 2022 reabrió sus puertas, y continúa como uno de los espacios más activos para el desarrollo de las artes, y para conocer más de la historia de Guadalajara.