La pandemia también agravó los cuadros graves de dermatitis atópica
Fotografía: AFP




Guadalajara, Jalisco.

La dermatitis atópica afecta a cuatro de cada 10 adolescentes en México, y esta enfermedad de la piel es la más común en niños y adolescentes. Lo grave es que, durante los últimos meses de pandemia, las consultas al especialista se redujeron, así como los diagnósticos, lo que ha provocado que los pacientes lleguen a solicitar atención con más afectaciones, tanto a nivel de la piel como en los aspectos emocionales y de autoestima.

La dermatitis atópica es una enfermedad con un origen inmunológico profundo que, en sus etapas más graves, no se controla a través de cremas o pomadas. Por ello, en el marco del Día Nacional, se hizo un llamado para que los pacientes acudan con los especialistas y así contar con un diagnóstico y tratamiento adecuado de la enfermedad. Así lo explica la presidenta de la Fundación Mexicana para la Dermatología, Rossana Llergo:

"La dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria, es una enfermedad crónica. Esto quiere decir que no tiene una curación, pero tiene un buen control con el tratamiento adecuado; tiene un buen control si hay un tratamiento oportuno. Vemos cómo se manifiesta la dermatitis atópica; estas placas o áreas con enrojecimiento o descamación, con costras o con áreas que están tan inflamadas que, en dermatología decimos: “la piel llora”, son áreas que están eccematosas, costrosas, porque esto va acompañado de un prurito o comezón tan intenso que irrumpe en la vida diaria del que padece dermatitis atópica".

Las medidas de confinamiento hicieron que los pacientes dejaran en segundo plano su tratamiento, generando un aumento en la gravedad de los síntomas, tales como sangrado, comezón, dolor, depresión y problemas de sueño, y en el marco del Día Nacional de la Dermatitis Atópica, a conmemorarse el 27 de noviembre, los dermatólogos hacen un llamado a quienes pudieran estar sufriendo esta enfermedad para controlarla.