Guadalajara, Jalisco.
Desde hace años, la obesidad se ha convertido en la pandemia del siglo. Es silenciosa y poco a poco va desgastando al sistema público de salud.
Los pacientes con obesidad, pero sobre todo con obesidad mórbida son de difícil manejo para las enfermedades crónicas que presentan, para todos sus sistemas.
- Pero cuando requieren una cirugía sobre todo de emergencia por ejemplo de una apendicitis, vesícula o fractura los riesgos para el paciente y las complicaciones para el médico son mucho mayores.
Y este problema se está incrementando, lamenta el cirujano general adscrito al Hospital Civil de Guadalajara Fray Antonio Alcalde, Carlos Nuño Guzmán:
“las mesas quirúrgicas y las camillas para trabajar de manera óptima y segura se necesita tener las dimensiones para evitar alguna situación de inseguridad, en el hospital civil se está trabajando afortunadamente para que los pacientes de estas características tengan mesas quirúrgicas óptimas.
Y también camillas y camas en las salas ya apropiadas ya en las salas o cuartos de descanso”.
En cuanto a los medicamentos y anestesia también es necesaria más cantidad, ya que el cálculo se hace conforme a su peso, lo que eleva todavía más los riesgos:
“la parte anestesiológica, los medicamentos van en razón al peso y también a los cambios metabólicos que sufren estos pacientes sobre todo a nivel hepático y renal propio de su obesidad.
Entonces afortunadamente en el hospital tenemos anestesiólogos sumamente capacitados para el manejo de estos pacientes y en cuanto al abordaje quirúrgico ciertamente son paredes abdominales mucho más gruesas".
Por esta razón, insiste el especialista que la obesidad debe ser tratada como una enfermedad y no como un problema estético.
En México, 72.1 por ciento de las personas mayores de 20 años tienen sobrepeso u obesidad.