Estados Unidos. 

Las promesas migratorias de la administración electa de Donald Trump podrían tener un impacto diplomático con países de la región. Expertos exploran diferentes escenarios en relaciones clave para Estados Unidos. 

 Varias de las políticas con las que se ha comprometido el presidente electo, Donald Trump, ponen sobre la mesa las relaciones internacionales de Estados Unidos, comenzando por las promesas de deportación masiva que podrían tener gran impacto con México.

Tony Payan, Director del Centro para EEUU y MX del Instituto Baker:

“Alrededor de 4 a 5 millones, de los 11 millones de residente indocumentados en los Estados Unidos son ciudadanos mexicanos. Nadie obliga a México a recibir a los que no son mexicanos […] realmente el gobierno mexicano no tiene ningún plan para recibir a esta gente, para reubicarlos a sus ciudades. Muchas de esas personas han estado en EEUU 10, 15, 20 y hasta 30 años”.

México ha expresado que busca llegar a un acuerdo para no recibir a ciudadanos de otros países, entretanto el sector empresarial ha anunciado estar preparado para ofrecer oportunidades laborales a sus conciudadanos deportados.

Claudia Sheinbaum, presidenta de México:

“Siempre vamos a defender a las y los mexicanos que están del otro lado de la frontera porque además son necesarios para la economía de Estados Unidos”

Expertos estiman que este será tema central en la renegociación del tratado de libre comercio entre Estados Unidos, México y Canadá. No las únicas naciones que se vería impactadas por las políticas anunciadas y no limitadas a la migración.

 Tony Payan, Director del Centro para EEUU y MX del Instituto Baker:

“Hasta hoy Estados Unidos no tiene realmente una política exterior coherente clara hacia Latinoamérica, depende del país, depende del momento de otros actores. Hay preocupación sobre los espacios comerciales, económicos políticos y diplomáticos que China empieza a ocupar en todo el continente”.

Daron Shaw, Profesor de políticas en UT Texas:

“Espero que en el futuro la política exterior estadounidense siga comprometida, siga siendo una fuerza en pro del progreso, de los derechos humanos y de los valores democráticos, pero reconozco que es difícil juzgar qué significa eso en relación con Ucrania, Israel, América Latina o África. ¿Cuándo deberíamos involucrarnos y con qué intensidad?”.

• Expertos concuerdan en que el futuro de las relaciones diplomáticas será indudablemente impactado por la política interna que definirá desde el futuro de millones de indocumentados, hasta los fondos para dar apoyo económico o logístico a naciones aliadas.

Laura Sepúlveda, Voz de América.