Buenos Aires, Argentina. 

En una pequeña cafetería de Buenos Aires se gestó, sin saberlo, uno de los dulces más cotizados de Argentina y que resultó ser el mejor de todo el mundo. Hablamos del alfajor… pero no uno cualquiera, sino uno que incluye crema de chocolate y jalea de frambuesas.

Una receta que salió del gusto por la tradición y se ha coronado como la mejor del mundo.

“Arranqué haciendo alfajores en el 2021, en marzo…”.

Sebastián nunca pensó que aquel curso de cocina, que hizo a los 25 años cambiaría su vida, casi dos décadas más tarde.

• Sebastián Gaudio, Ganador del Mundial de Alfajores. 

“Yo soy chef, pastelero y chocolatier. Arranqué haciendo el alfajor con merengue italiano y dulce de leche, que era el que más me gustaba a mí”.

Una empresa que comenzó de un gusto individual… Aún motivado por sus sueños, la pandemia se interpuso entre él y sus metas…

Decidió seguir adelante, vendió su vehículo, abrió una cafetería y desde allí, empezó a vender más de 30 variedades de este dulce. Todas creadas por él.

Los esfuerzos del inicio, dieron frutos porque Sebastián nunca imaginó que en su pequeño negocio se gestaría el que ha resultado ser el mejor alfajor del mundo.

“En el mundial éramos más o menos 200 empresas, de las cuales todas presentaron más de una muestra.

Entre las 400 muestras que probó el jurado a la final llegan 18 oros, de los cuales el alfajor fue finalista y de los 18 oros sale el campeón mundial ¿no?. Y el nuestro es el que termina ganando la copa de campeones”

Sebastián aprendió los secretos de la pastelería de manera autodidacta. Casi sin experiencia pero con toda la seguridad, en agosto de este año se presentó en el mundial, que se realiza desde 2022, y en el que participan pasteleros de distintos países. 

“Tenemos un proceso. La primera galleta tiene manteca, chocolate y harina. Bueno, esa es bien ‘chocolatosa’, es la base. Después hacemos un ganache con chocolate semi amargo en corona".

En la corona le ponemos mermelada de frambuesa. Le volvemos a poner la tapa y hacemos otro volcán de mermelada de frambuesa. Y luego lo bañamos en 70% cacao. Una vez que está bañado, le tiramos frambuesas liofilizadas arriba.

"¿Qué es la frambuesa liofilizada? Se deshidrata a menos 30 grados, y de un kilo de frambuesas que dan 80 gramos. Queda todo el sabor súper concentrado y eso realza muchísimo”.

Como pastelero, es tan meticuloso que no permite que nadie interceda en sus recetas y mucho menos las comparte. Incluso teme que le roben las ideas y, por esta razón, desecha los restos lejos del local para que nadie pueda relacionarlo.

“Lo que siente la gente cuando prueba el alfajor campeón del mundo es una explosión, con el cambio de textura en lo sensorial. Una tapa de chocolate, una tapa de merengue, la frambuesa ácida, el dulce de la tapa de merengue y lo amargo de chocolate es explosivo”.

La consagración implicó un considerable aumento en sus ventas, a tal punto que Sebastián decidió ampliar su negocio para fabricar un volumen más grande de alfajores y así permitir que el mejor alfajor del mundo sea apreciado en otros países.

Por: Gonzalo Bañez Villar.