Stuttgart, Alemania.
Activistas de la organización ambientalista Greenpeace modificaron hoy un logo de Mercedes-Benz al añadirle tubos de escape humeantes con el fin de reclamar el abandono de los motores de combustión.
"¿Bajo ninguna buena estrella?", se preguntaron los ambientalistas delante del Ministerio de Economía en un banner gigante.
Desde su punto de vista, el fabricante alemán de automóviles Daimler pretende utilizar el motor de combustión por un periodo de tiempo demasiado extenso. Añadieron que otros fabricantes tienen planes mucho más ambiciosos para reemplazarlo.
Además, acusaron a la ministra de Economía del estado federado de Baden-Wurtemberg, Nicole Hoffmeister-Kraut, de retrasar el adiós al motor de combustión con su apoyo a los combustibles sintéticos.
El director general de Daimler, Ola Källenius, manifestó la semana pasada que no considera sensato poner fin prematuramente al lucrativo negocio de los motores de combustión. Al mismo tiempo, dejó en claro que Daimler está preparada para el caso de que la movilidad eléctrica se imponga más rápido de lo previsto.
En un comunicado difundido hoy por Greenpeace, se subraya que la industria automotriz subestima la velocidad a la que cambia el sector. El texto agrega que una política económica previsora debe señalar un rumbo claro al sector.
Hoffmeister-Kraut argumentó que gran parte de los automóviles en Alemania hoy en día circulan con motores a combustión. "Si queremos reducir fuertemente las emisiones de CO2, no podemos esperar a que esta gigantesca flota de vehículos sea renovada con motores que funcionan con otra tecnología", dijo.